La DGA descubre ahora una deuda con las Cortes de más de 22 millones

El Ejecutivo se compromete a ir pagando "poco a poco" y se plantea además solicitar una quita parcial.

Imagen del pleno de investidura de Javier Lambán en las Cortes de Aragón.
Imagen del pleno de investidura de Javier Lambán en las Cortes de Aragón.
josé miguel marco

El Gobierno autonómico de Javier Lambán se acaba de encontrar con otro importante agujero en sus cuentas. Al revisarlas, ha detectado una deuda con las Cortes de Aragón que en los últimos tres años se ha situado en más de 22 millones de euros.


Esta cantidad supera con creces el presupuesto anual de la institución, que en este ejercicio asciende a 18,76 millones (17,77 para mantener la actividad legislativa y otros 986.513 euros para atender los gastos del palacio de la Aljafería, sede del Parlamento). Estas partidas deben ser transferidas en cuatro pagos trimestrales, pero el nuevo equipo de gobierno PSOE-CHA ha descubierto apenas un mes después de llegar al Pignatelli que muchos de esos abonos no se llegaron a materializar.


Según los datos de que disponen, el problema se viene arrastrando desde 2012, cuando no se hicieron los libramientos correspondientes a los seis últimos meses, que sumaban 8,1 millones. La deuda continuó aumentando al año siguiente, cuando tampoco se abonó el cuarto trimestre (4,6 millones). Y lo mismo ocurrió en 2014, cuando el Ejecutivo PP-PAR presidido por Luisa Fernanda Rudi volvió a dejar sin pagar el último plazo, con lo que la factura pendiente se elevó otros 4,6 millones. Y a los 17, 4 que se dejaron de ingresar en los tres últimos años hay que sumar el pago correspondiente al trimestre, mientras que los dos primeros sí que se transfirieron a las Cortes.


Fuentes de la DGA mostraron ayer su sorpresa ante esta situación heredada del anterior Ejecutivo y expresaron el "compromiso" del gabinete de Lambán de "ir pagando poco a poco" la abultada deuda con la que se han encontrado, una vez que se analice cómo hacer frente a este nuevo contratiempo. No obstante, añadieron que la intención es "plantear una quita" para evitar asumir la totalidad del importe comprometido.


Y es que pese a tratarse de obligaciones reconocidas en el presupuesto de la Comunidad, desde 2012 buena parte de las transferencias que debían haber recibido las Cortes no han llegado, lo que ha obligado a la Cámara a echar mano de sus remanentes para poder asumir sus gastos, entre los que las subvenciones a los grupos parlamentarios suponen más de un 17% del presupuesto. Pero fuentes oficiales reconocieron ayer que el remanente se está agotando después de tanto tiempo con el capítulo de ingresos en precario, por lo que la situación empieza a ser delicada. Y recordaron que en los últimos años se han convertido en habituales los "toques de atención" que han tenido que dar a la DGA para ir cobrando las cuantías aprobadas.


De momento, la última junta de portavoces acordó por unanimidad, a instancias de los nuevos grupos –Podemos y Ciudadanos– solicitar que se libren cantidades para hacer frente a los gastos –principalmente nóminas– generados en estos primeros meses de la legislatura.

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