El Ayuntamiento exige que los menores puedan entrar en los conciertos

Rivarés se dirige a la DGA para que derogue o modifique el decreto de espectáculos públicos aprobado por el PP.

El concejal de Economía y Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, se dirigió ayer al Gobierno de Aragón con el objetivo de que propicie la modificación del decreto que regula la celebración de espectáculos públicos y que prohíbe la presencia de menores en aquellas actividades en las que se vendiera alcohol si no iban acompañados de sus padres. Según el Consistorio, se trata de un decreto "muy dañino" para la música popular en directo y para las salas de conciertos, en las que es habitual que se sirva alcohol.


No es la primera vez que el Ayuntamiento de Zaragoza se posiciona en contra de este decreto, aprobado en 2014 por el Ejecutivo autonómico de Luisa Fernanda Rudi. El Consistorio zaragozano, con gobierno del PSOE, fue muy beligerante, no solo por los efectos sobre el sector de la música en directo, sino también por su impacto en las fiestas del Pilar. Ahora es Zaragoza en Común (ZEC) la que se posiciona en contra de esta norma.


Hay que tener en cuenta que el nuevo decreto obligó durante las fiestas del Pilar a establecer espacios separados para menores, donde no se vendía alcohol, y mayores de edad en el recinto festivo del parquin norte de la Expo 2008. En la carpa de Interpeñas aquellos que no hubieran cumplido los 18 años debían acudir acompañados por sus padres, ya que no había zonas diferenciadas. El decreto autonómico afectaba además directamente a las salas de conciertos de la ciudad, un sector que ha crecido en los últimos años.

Rivarés se equivoca de consejero

La iniciativa municipal fue acompañada por un error del concejal de Cultura del Ayuntamiento, que fue aclarado por el propio Gobierno de Aragón. Rivarés se dirigió al consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, cuando la competencia en materia de espectáculos públicos corresponde al titular de Presidencia, Vicente Gillén, responsable además de Justicia e Interior.


Al margen de la anécdota, fuentes del Ejecutivo autonómico indicaron que estudiarán la petición de Fernando Rivarés y que "se tomará una decisión pronto". Durante la pasada legislatura, el grupo parlamentario socialista también se posicionó en contra del decreto.


La misiva que Rivarés dirige a Soro se expresa en términos muy duros en contra del decreto autonómico. Según el concejal de Economía y Cultura, la normativa supone "una insólita política de escasos efectos educativos pero de enormes efectos negativos para la música, los músicos, las salas y una cultura musical que genera públicos, artistas, economía y hábitos de consumo cultural esenciales".


En respaldo a la música en directo, Rivarés consideró que con este decreto el Gobierno de Aragón levantó "barreras culturales y llenas de hipocresía y demagogia". "Toda una generación de jóvenes de Aragón se está perdiendo el acceso a una cultura vibrante justo cuando esa posibilidad podría cambiarles como personas", declaró.


Tras subrayar "la sensibilidad" de Soro en las cuestiones culturales, Rivarés señaló que Zaragoza es "una ciudad lleva de vida musical" e hizo referencia a la ley de la Infancia y Adolescencia de Aragón, "que ya prohíbe servir alcohol a los menores de edad sin los represivos andamiajes de este decreto".

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