"Ya lo podemos decir bien alto: somos equipo de la Liga de Fútbol Profesional". Luis García Tevenet, entrenador del Huesca, por fin respiró aliviado tras consumarse la proeza. "Ha sido un año muy sufrido, donde hemos tenido que sobreponernos a numerosas dificultades", confesó el técnico, quien subrayó "la enorme dificultad" de alcanzar la categoría de plata: "No os podéis imaginar lo complicado que es subir. De hecho, la Segunda División B son cuatro grupos de 20 equipos cada uno, muchos de ellos optando también al ascenso, y hay que adaptarse y competir en todas las situaciones: campos grandes, campos estrechos, césped artificial, barro... Al final, afortudamente, hemos culminado la temporada de la mejor manera posible", recordó el entrenador azulgrana, muy emocionado, durante su comparecencia ante los medios de comunicación.

"Detrás de este éxito, hay un gran trabajo de muchísima gente –añadió el técnico–. El éxito es los futbolistas y de todo el cuerpo técnico. Tenemos una plantilla sensacional, que ha dado el máximo durante todo el año. Los futbolistas han dado una lección continua. Les estoy muy agradecido por el trabajo que han desarrollado", insistió Tevenet, a quien, por momentos, incluso se le saltaron las lágrimas.

El entrenador azulgrana, que confirmó su continuidad en el banquillo el próximo curso, recordó el exitoso recorrido de su equipo: "Ha sido un año de alegrías. Aquí nunca había estado el Barça, y nunca se había llegado tan lejos en la Copa del Rey (dieciseisavos), y nunca habíamos sido campeones de Liga. Y ahora llega el ascenso... Estos jugadores se los merecen todo. Yesta afición, que ha estado soberbia, también", recordó.