España cierra 2014 con un déficit público del 5,7% y cumple solo con el objetivo de la UE

Las comunidades autónomas incumplieron el objetivo en seis décimas y empeoraron los datos de 2013

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ayer, junto a Soraya Sáenz de Santamaría.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ayer, junto a Soraya Sáenz de Santamaría.
Fernando Alvarado/efe

El optimismo sobre los datos macroeconómicos llevó al Gobierno el año pasado a realizar una jugada arriesgada. Cuando aprobó el plan de Estabilidad en abril se atrevió a rebajar el objetivo de déficit fijado por Bruselas del 5,8% al 5,5% del PIB. Ayer ese movimiento se le volvió en contra. Y es que esa decisión provocó que España haya cumplido con el objetivo de déficit de 2014 solo a medias.


El desfase entre ingresos y gastos del conjunto de las administraciones públicas se situó en el 5,72%, una décima inferior al 5,8% pactado con Bruselas, pero dos décimas superior al límite del 5,5% que se había autoimpuesto el Ejecutivo. De esta forma, el déficit público cerró el año pasado en los 60.537 millones de euros, un 8,8% menos que el ejercicio anterior. Una cifra que, según destacó el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, incluye una "circunstancia excepcional" como fue la devolución del ‘céntimo sanitario’ que supuso casi 1.700 millones extra de desembolso. Sin esta cuantía, resaltó el ministro, el dato se quedaría en el 5,56%.


El desglose del déficit señala claramente a las comunidades autónomas como responsables del desvío. Mientras el Estado cumplió con lo previsto al situarse en el 3,54% (37.468 millones) y la Seguridad Social hizo lo propio al cerrar en el 1,06% (11.202 millones), el peor comportamiento fue para la administración regional.


Su déficit sobrepasó el 1% fijado y alcanzó el 1,66% (17.529 millones), un resultado aún más elevado que el registrado en 2013, cuando acabaron en el 1,52%. Esto supone que, lejos de reducirlo, las comunidades aumentaron su déficit en 1.597 millones más.


De hecho, solo cuatro autonomías (País Vasco, Navarra, Canarias y Galicia) no excedieron los límites pactados. Otras como Murcia (2,85%), Cataluña (2,58%), Extremadura (2,44%) o Valencia (2,39%) lo duplicaron con creces.

Sin embargo, el propio Montoro reconoció que este objetivo autonómico era "exigente" porque las comunidades tenían "menos recursos derivados del sistema de financiación". En este sentido, el ministro aseguró que los objetivos de déficit autonómico de 2015 (0,7%) son más "accesibles" debido a que el reparto derivado del sistema de financiación aumentará gracias a la recuperación económica.


Además, recordó que los nuevos mecanismos aprobados por el Gobierno, como el fondo de facilidad, permiten a las autonomías ahorrarse el coste de los intereses de la deuda captada en el mercado, que son asumidos por el Estado. Por último, Montoro señaló el ahorro que supondrán para los gobiernos regionales los protocolos que se firmarán con la industria farmacéutica para rebajar los costes en la compra de medicamentos.


El ministró resaltó que, pese al incumplimiento, todas las comunidades habían hecho un "importante esfuerzo" en controlar sus gastos sin "perjudicar" el Estado de bienestar. Ante el debate sobre un nuevo sistema de financiación para mejorar los recursos de las autonomías, Montoro recordó que "la segunda fase" de la reforma fiscal se adentrará en reformar los impuestos cedidos a las comunidades como son Donaciones y Sucesiones. Eso sí, en la próxima legislatura. En cualquier caso, el desvío de las comunidades se compensó con el superávit del 0,53% (5.662 millones) que alcanzaron los ayuntamientos.


"España esta haciendo la política presupuestaria que permite el impulso económico y la recuperación", insistió Montoro. El titular de Hacienda resaltó que los dos grandes retos de la próxima legislatura son "el equilibrio presupuestario y la reducción de la deuda pública". Medidas que, según Montoro, contribuirán a crear empleo y permitir que se alcancen los 20 millones de ocupados que anunció Mariano Rajoy en el Debate sobre el estado de la Nación.


Además, el ministro se mostró convencido de que España cumplirá con los objetivos de déficit fijados en los próximos tres años y alcanzará el deseado 3% el próximo año.