Exculpados los cazadores acusados de furtivismo en un coto de Bailo

El juez atribuye además a un error la presunta falsificación de la guía del rifle.

El Juzgado de lo Penal número 1 de Huesca ha absuelto del delito contra la fauna y la flora a D. F. M. y D. S. G., los dos cazadores acusados de abatir un ciervo en un coto privado de Bailo en 2007, para los que la Fiscalía pedía 8 meses de multa. Según el magistrado, en el juicio no quedó probado que dispararan con un rifle con silenciador a un ciervo sin contar con autorización de los titulares del coto. Tampoco estima la acusación contra D. S. G., al que el fiscal imputaba además la falsificación de la guía de un arma vendido a su compañero, por la que solicitaba un año y medio de prisión. Durante el juicio, esta acusación quedó en entredicho porque la Guardia Civil admitió que podía deberse a un error administrativo. Según la sentencia, "fue realizada por error y sin ánimo de faltar a la verdad".


Pese a que hay constancia de la presencia de D. S. G. en el coto (él lo reconoció, se acreditó que estaba su coche y se localizaron las llamadas del móvil), el magistrado considera que la principal prueba de cargo, el reconocimiento por parte del guarda del coto, está "viciada". Este dijo haberlo visto junto a otro hombre en un coche sospechoso sin luces y que luego oyó dos disparos con silenciador a una manada de ciervos. Pero, según el juez, las fotografías que se le enseñaron al testigo en sede policial no están adjuntadas en el atestado y por lo tanto no se puede valorar si existían similitudes entre los sujetos. Por ello, la diligencia policial es "nula", y además no hubo rueda de reconocimiento para confirmar la identificación. Otro testigo que esa noche observó a dos individuos disparar, no les vio la cara.


La acusación popular estuvo ejercida por la Federación Aragonesa de Caza, que pidió penas de 12 meses de multa, con una cuota diaria de 12 euros, y tres años de inhabilitación especial para el derecho de cazar. Por su parte, los dos abogados defensores solicitaron la libre absolución negando la participación en los hechos.