Las mil familias de la fábrica Filtros Mann

Mann+Hummel, empresa alemana de raíz aragonesa, celebró ayer medio siglo produciendo en Zaragoza, primero en Avenida Cataluña y luego en Plaza

Luisa Fernanda Rudi junto al director de la fábrica, Javier Sanz, ayer.
Luisa Fernanda Rudi junto al director de la fábrica, Javier Sanz, ayer.
dga

José Ignacio Murillo recuerda como si fuera ayer el mes de mayo de 1964 cuando con 24 años, trabajando de ingeniero en la empresa TA-CA (Talleres Cataluña), ubicada en la avenida del mismo nombre, recibió la visita de unos representantes de la veterana empresa alemana Filterwerk Mann+Hummel que querían crear una fábrica española de filtros para automóviles y camiones. Fue a él a quien designó Julián Laudo, director general de TA-CA, como el idóneo para devolver la visita, viajar a Ludwigsburg y concretar el proyecto. "Allí tuve que improvisar el plano de la fábrica que me gustaría construir". Y del papel al terreno, porque a principios del 65 ya se inauguró esta fábrica con una inversión de más de 50 millones de pesetas y 250 puestos de trabajo en el número 218 de la avenida de Cataluña, donde estuvo 41 años hasta que en 2005 se trasladó a Plaza.


"Somos la única empresa que queda viva del Plan de Desarrollo del franquismo. TA-CA puso 35,7 millones, los alemanes 12,5 y 5 la Administración". La clave del éxito, según Murillo, que dirigió esta fábrica durante 34 años (de 1965 a 1999) "es que siempre creímos en el proyecto, y aunque TA-CA dejó de hacerlo en 1971 porque pensó que el negocio de los filtros no tenía futuro –en vehículos solo estaba Seat, Pegaso y poco más–, vendió su parte. Las dos familias Mann+Hummel se hicieron con la propiedad y pasó a llamarse Filtros Mann, pero los alemanes siguieron depositando su confianza en nosotros dejándonos hacer, crecer y ser una empresa zaragozana".


Aunque hubo momentos difíciles cuando se paralizó la concesión de nuevas tarjetas de transporte para camiones y para sobrevivir hubo que fabricar cacerolas y 200.000 cocinas de campaña para Cuba, salir a vender a Francia e Inglaterra en aquellos años permitió salir del bache. "En 1974 vendíamos ya 4.200.000 filtros, un tercio de la producción europea. Venían clientes a visitar nuestra planta y decían ‘esto es Japón’". No obstante, Murillo confiesa que de lo que se siente más orgulloso es de que esta factoría "haya sido capaz de dar trabajo directa o indirectamente durante 50 años a 1.000 familias, permitiéndoles ser personas de primer nivel, señores con un buen puesto de trabajo y sueldos muy dignos. Eso me llena de satisfacción". "Sin un equipo motivado y una empresa que ha sabido salir fuera con energía y bríos, no sería posible estar cumpliendo 50 años", corroboró el actual director general Javier Sanz en la celebración del aniversario al que no faltó la presidenta del Gobierno aragonés y otras autoridades.