El 40% de los expedientes son por edificios que no estaban ni dados de alta

El 24% se deben a ampliaciones o rehabilitaciones integrales;el 32%, a reformas o cambios de uso; y el 4% restante, a piscinas.

Hacienda también tiene datos sobre los tipos de infracciones detectados en los 154 municipios aragoneses en los que ya se ha completado la regularización catastral. Según el Ministerio, el 40% de los 23.274 expedientes tramitados hasta ahora se abrieron para legalizar inmuebles de nueva construcción que no estaban dados de alta en el Catastro y que por tanto directamente no pagaban el IBI.


El 24% de las regularizaciones se han llevado a cabo en construcciones que sí que se habían declarado en el Catastro pero que posteriormente fueron ampliadas o rehabilitadas integralmente sin que sus titulares notificasen esos cambios; otro 32% se ha debido a reformas y cambios de uso que tampoco estaban declarados; y el 4% restante corresponde a la construcción de piscinas. En estos casos, sus dueños pagaban menos IBI del que debían.


La ley del Catastro establece que es obligatorio comunicar "la realización de nuevas construcciones y la ampliación, rehabilitación, reforma, demolición o derribo de las ya existentes, ya sea parcial o total". "No se considerarán tales las obras o reparaciones que tengan por objeto la mera conservación y mantenimiento de los edificios y las que afecten solo a características ornamentales o decorativas", añade. También hay que declarar "la modificación de uso o destino y los cambios de clase de cultivo o aprovechamiento".