'Boyhood' se lleva el Bafta a la mejor película en una noche muy repartida

El filme de Linklater (elegido también mejor director) ganó en los premios del cine británico, que también reconocieron a Julianne Moore, Eddie Redmayne y Patricia Arquette.

‘Boyhood’, la película sobre la familia que Richard Linklater rodó en tiempo real durante años, fue ayer la ganadora en los Bafta, los premios del cine británico. Se impuso a las películas ‘El gran hotel Budapest’, ‘La teoría del todo’, ‘The Imitation Game (Descifrando el enigma)’ y ‘Birdman’. ‘Boyhood’ se llevó además otros dos premios importantes, el de mejor director y el de mejor actriz de reparto, que fue para Patricia Arquette.


‘Boyhood’ ganó, pero no arrasó en una noche de galardones muy repartidos. Por ejemplo, en las categorías de interpretación. Julianne Moore fue elegida mejor actriz por ‘Siempre Alice’, en la que interpreta a una enferma de Alzheimer. "Quiero agradecer este premio a todo el equipo de la película, es un verdadero honor para mí estar aquí esta noche. Sobre todo, quiero dedicárselo a las mujeres de mi vida, en especial a mi abuela y a mi madre", dijo, emocionada. Y el mejor actor en la noche de los Bafta fue Eddie Redmayne, por meterse en la piel de Stephen Hawking en ‘La teoría del todo’. Precisamente, el científico estuvo presente en la gala e incluso entregó el premio a los mejores efectos especiales, que se llevó la épica ‘Interstellar’. "Quiero dedicarle este honor a tres familias: la mía, la profesional y a otra familia increíble, los Hawking", dijo Redmayne.


J. K. Simons se llevó el Bafta al mejor actor de reparto por su papel de durísimo profesor en ‘Whiplash’.


El premio a la mejor película en habla no inglesa fue para la polaca ‘Ida’, que solo un día antes se había llevado también el Goya. Estos premios la acercan aún más al Óscar a la mejor película extranjera, para el que también está nominada. ‘La teoría del todo’, por su parte, se llevó el premio a mejor película británica, un Bafta que entregó David Beckham.


La ceremonia tuvo lugar en la Royal Opera House de Londres, con un espectáculo que comenzó al ritmo de la banda de rock Kasabian. El grupo actuó delante de una pantalla gigante, que mostró imágenes de las películas que aspiraban a llevarse alguno de los galardones que otorga la prestigiosa Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión.