Comienza la reparación de la antigua clínica del doctor Lozano en Lagasca

La Gerencia de Urbanismo exigió a los propietarios adecentar el exterior del edificio
para evitar desprendimientos. El inmueble está catalogado por su interés arquitectónico

Comienza la reparación de la antigua  clínica del doctor Lozano en Lagasca
Comienza la reparación de la antigua clínica del doctor Lozano en Lagasca

El emblemático edificio de la antigua clínica del doctor Lozano se prepara para las obras. En los últimos días han comenzado los trabajos de montaje de las vallas y andamios para proceder a la la reparación del exterior del edificio con el objetivo de evitar desprendimientos, así como el mantenimiento y ornato del inmueble, que está catalogado por su interés arquitectónico.


Fuentes de Urbanismo explicaron que se advertía deterioro en la fachada. En el requerimiento, que se remonta a enero de 2012, se insta a la propiedad la reparación de la cubierta, buhardillas, alero, molduras, cornisas y losas de balcones, con el objetivo de eliminar el riesgo de desprendimiento. Además se reclama la reparación o sustitución de los vidrios rotos y fragmentados.


Con estos trabajos se da un paso al adecentamiento del edificio, a la espera de que en el futuro pueda acometerse una rehabilitación. La antigua clínica del doctor Lozano es una casa con historia, no solo por haber sido centro médico de referencia durante años para muchos aragoneses, sino por su belleza arquitectónica.


Construido a principios del siglo XX en la confluencia del paseo de Sagasta y Lagasca, tiene la firma del arquitecto zaragozano Félix Navarro y combinó los usos de vivienda y clínica. Sufrió su primera reforma en 1916 y después vinieron otras más, que desvirtuaron el proyecto de Navarro. Pero, pese a todo, "es de gran interés en el contexto de la obra de este arquitecto y es uno de los escasos ejemplos de residencia burguesa de principios del siglo XX que se conserva en el paseo Sagasta", según consta en su catalogación como Bien del Patrimonio Cultural Aragonés, que se acordó en 2009.


Este edificio se vio inmerso en una polémica por un estudio de detalle en el que se permitía construir un bloque de ocho plantas de altura (que después serían 12) en el solar que ahora ocupa el jardín privado situado junto a la antigua clínica, que dispone de capacidad para 6.500 metros cuadrados edificables. Este proyecto causó protestas en los vecinos y acabó en los tribunales.


En junio de 2013, el TSJA anuló el estudio de detalle por cuestiones vinculadas a la iluminación, ventilación, dimensiones de los patios y distancias respecto a otros edificios. El juez advirtió de que existía un incumplimiento de la norma de separación de linderos y de los inmuebles. El Ayuntamiento recurrió al Supremo, que aún no ha emitido sentencia, según fuentes de Urbanismo.