Empieza la restauración del Tanto Monta tras 12 años de bloqueo y 60 cerrado al público

La obra en el artesonado del siglo XV del palacio episcopal oscense comenzó ayer con la colocación del andamiaje.

La obra comenzó ayer con el montaje del andamio por un lateral del recinto catedralicio
Empieza la restauración del Tanto Monta tras 12 años de bloqueo y 60 cerrado al público
Rafael Gobantes

Doce años después de redactar el primer proyecto, empiezan las obras para devolverle el esplendor al artesonado mudéjar del salón del antiguo palacio episcopal de Huesca, conocido como el Tanto Monta porque lleva la famosa inscripción de los Reyes Católicos. La obra comenzó ayer con la colocación del andamiaje, que se prolongará durante dos o tres semanas, y será en febrero cuando todo esté listo para intervenir en la valiosa estructura policromada del siglo XV. Tras casi dos años de trabajo, lucirá de nuevo coincidiendo con la celebración del V Centenario de la muerte de Fernando El Católico, en 2016. El final marcará también la reapertura de la estancia 61 años después de que se cerrara al culto en 1955, por lo que la mayoría de los oscenses no lo conocen.


El obispado de Huesca se plantea un uso cultural para este salón, que fue rehabilitado en 2010 por el Gobierno de Aragón, en virtud de un convenio con el Ministerio de Cultura. Este último organismo era el encargado de recuperar el alfarje, pero el inicio acumula 12 años de retraso. Cuando parecía que salía adelante tras la adjudicación de los trabajos en 2010, una empresa excluida del concurso llevó el asunto a los tribunales y, finalmente, la Audiencia Nacional desbloqueó el proceso en junio de 2013, por lo que hubo que volver a empezar.


Ahora, la empresa Restauración de Edificios, Artesonados y Retablos Alonso S. A., con sede en Zamora, realizará los trabajos por un importe de 496.248, 23 euros. De esta cantidad, se contemplaban 57.000 euros en el presupuesto de 2014, 230.000 euros para este año; y los 210.000 restantes en 2016. El pasado mes de diciembre se realizaron trabajos previos para analizar las necesidades de la obra así como para tomar imágenes de vídeo para realizar un seguimiento de la restauración, si bien el proyecto ya estaba hecho.


La descarga del material y la instalación del andamio comenzó ayer por el acceso lateral al recinto catedralicio desde la calle de Forment. Uno de los grandes ventanales de la estancia se ha desmontado para utilizarlo como vía de acceso y evitar así el paso por la catedral o el Museo Diocesano de Huesca. Para el mismo, situado a la altura de una primera planta, han comenzado a montar los andamios con una escalera de peldaños por donde entrará el personal. En el interior, será necesaria la colocación de una gran estructura, a 1,80 metros de las vigas y con un tablero continuo, que permitirá el trabajo de detalle.


El andamiaje se completará con una buena iluminación para efectuar la tarea, que llevará a cabo un grupo de nueve personas, casi todos restauradores. Además, el equipo multidisciplinar se completa con un arquitecto, un arquitecto técnico, un químico y un historiador. Esta empresa de origen familiar, de la que ya forma parte la sexta generación, es experta en la restauración de madera y ha trabajado en las catedrales de Lugo, Santiago de Compostela, Orense, Zamora o Valladolid.