Según detallaron fuentes municipales, habrá cuatro semáforos

y uno de apoyo que regularán el tráfico en dicho cruce. La avenida de la Constitución es la principal vía de acceso al centro del casco urbano, así como la salida natural para tomar la carretera N-330 y la autovía Mudéjar. Por su parte, la calle de Ramiro I se utiliza tanto por quienes circulan hacia el colegio Foro Romano, la piscina cubierta, el gimnasio, el campo de fútbol o las pistas de pádel como para los que se dirigen hacia el colegio Ramón y Cajal, el Ayuntamiento, el consultorio médico, el auditorio, el polideportivo o las aulas de cultura.

Desde la Policía Local aseguran que este es el punto donde más se colapsa el tráfico, sobre todo en horas punta, coincidiendo con la entrada y salida de los centros escolares (entre las 9.00 y las 10.00 y las 16.00 y 17.00), así como cuando coincide la vuelta a casa de muchos vecinos con los horarios de actividades extraescolares. Desde el pasado septiembre, además, los dos colegios tienen el mismo horario de entrada y salida, lo que ha incrementado los desplazamientos en coche a esas horas.

"Los semáforos llevan instalada una espira electromagnética que medirá el caudal de tráfico en la zona para su regulación", explican fuentes municipales. En principio, las señales luminosas funcionarán en las horas punta, pero una vez instalados se adaptarán a las necesidades puntuales atendiendo a la intensidad de tráfico, según detalla el propio alcalde, Jesús Pérez.

Los policías locales recuerdan que, salvo un atropello a un peatón que hubo hace unos años y que obligó a mover el paso de cebra del principio de la calle de Ramiro I, nunca se han registrado problemas importantes. Pero los embotellamientos sí que son habituales en momentos puntuales, por eso confían en que la colocación de semáforos solucione el problema.

Cuando hay mucho tráfico, el principal hándicap en la circulación en ese punto se da para los vehículos que quieren incorporarse desde la calle de Ramiro I a Constitución en dirección hacia la salida del municipio porque tiene que esperar a tener vía libre en uno y otro sentido. Según técnicos municipales, el presupuesto para la colocación de los semáforos es de unos 13.500 euros y se espera que estén colocados y en funcionamiento antes del 15 de febrero.

En principio, solo se va a regular con semáforos el tráfico en ese punto, aunque no es el único en el que se producen atascos puntuales. Los agentes municipales aseguran que las confluencias de la avenida de la Constitución con la calle de Huertos, así como la misma avenida con la de San José también generan problemas, ya que concentran gran parte del tráfico que se dirige hacia la zona industrial de la localidad.

Que la duodécima localidad más grande de Aragón, Cuarte, no tenga semáforos contrasta con la curiosa circunstancia de que un pueblo con 39 empadronados, Purujosa, también en la provincia, sea el más pequeño del mundo con regulación semafórica. Y que, por cierto, facilita el tráfico rodado en la estrecha calle Mayor.