Una semana después del 24 de diciembre los aperitivos navideños reseñados en la crónica de hace siete días volvieron a repetirse. Fue el último día del año y, de nuevo, en varios escenarios zaragozanos se celebraron animados encuentros.

Eso sí, el aperitivo de Nochevieja no suele ser tan popular ni multitudinario como el de Nochebuena. Y es que el último día del año mucha gente reserva fuerzas para disfrutar de una larga jornada festiva.

El entorno de la plaza de San Miguel –principalmente las calles La Cadena, Antonio Agustín y Romea– volvió a ser un buen punto de arranque. Establecimientos como Los Cabezudos o la taberna Pedro Saputo estuvieron muy animados. Tampoco faltó ambiente en la plaza del Pilar, donde el pasaje del Ciclón cada vez atrae a más gente. Al sol, en las terrazas, o en el pasaje cubierto, los amigos de Juanjo Aísa, del restaurante El Real, protagonizaron una gran quedada para despedir el año en condiciones.

Otro clásico del 31 de diciembre es Gregory´s, donde acude la gente después del tapeo a tomar una copa antes de retirarse a sus respectivas celebraciones familiares. Pero si hay un local que se está convirtiendo en auténtico referente en el entorno de la plaza de los Sitios, ese es Dobleuno. Hasta tal punto que últimamente se ha visto tomar el aperitivo por allí a personajes como Luis Alfonso de Borbón, Emma Suárez, Hermoso de Mendoza o Nacho Montes, entre otros.

El pasado 31 de diciembre el equipo de Dobleuno no recibió visitas tan ilustres, pero de que el vermuteo estuviese muy animado se encargaron Pedro Vives, Eduardo Pola, Maribel Cebrián o Fernando Joven, entre otros, acompañados de habituales del local como Patricia Larraz, Luis Navarro, Jorge Pradas, Mara Pina, Mónica Suárez, Eugenia Aragonés, Conchita Berruete y Elena Arcusa.

También hubo un buen ambiente en el bar Marengo de Kike Júlvez y Carlos Vallejo, estupendamente decorado con muérdago. Todos los asistentes que coincidían bajo las ramitas colgadas por el local tenían que besarse, así que el aperitivo resultó muy cariñoso. Muy cerca, en La Bocca, el año se despidió brindando con Aperol Sprintz. Por allí se acercaron Mauge Labarta, de Joyería Agüeras, y Conchita Orduña, propietaria del restaurante EL Juncar, junto con Marta Abiol e Inma Tomás.

Pero la cita más multitudinaria tal vez fue la del Mesón Martín. Alrededor de 500 personas disfrutaron de un aperitivo que se prolongó hasta más allá de las cinco de la tarde. Desaparecieron las mesas y por todo el local se colocaron barriles para disfrutar de un vermuteo de calidad, como el que cada día del año ofrecen Sergio Martín y su equipo en este mesón.

Para la ocasión, todos se disfrazaron y, además, la cita estuvo amenizada por un DJ que no dejó de pinchar música de los años 80. Tanto se animó el personal que la fiesta continuó en el cercano bar de copas Laguna de Gómez. Y de allí, casi directos a comer las uvas.