La cifra de niños con tosferina multiplica por cinco la media de los últimos años
Esta enfermedad está repuntando en la Comunidad, según el Boletín Epidemiológico de Aragón
En lo que va de año se han registrado 53 casos, frente a los 11 de ejercicios pasados
Dado lo infecciosa que es esta dolencia, lo fácilmente que se contagia y el grave daño que puede causar en niños pequeños, la Sociedad de Pediatría de Aragón, La Rioja y Soria no descarta que tengan que revisarse las estrategias de vacunación vigentes hasta ahora, si el número de casos de tosferina sigue en aumento.
García recuerda que la tosferina es muy contagiosa y que afecta a todas las edades, no solo a niños. Y es ahí donde los pediatras ven el mayor riesgo, ya que la dolencia en adolescentes y adultos jóvenes es más difícil de detectar porque los síntomas que presenta son molestos, aunque no graves. La enfermedad comienza como un resfriado común (con estornudos, fiebre leve, secreción nasal y tos seca y persistente que se prolonga durante varias semanas), que no impide hacer vida normal.
Lo que convierte a estos pacientes, que en la mayoría de los casos desconocen que tienen tosferina, en "reservorios y fuentes de infección para los niños más pequeños (menores de tres meses), que son los que sufren las formas más graves de la enfermedad, que pueden llevarlos incluso a la muerte", explica García.
Esta medida aún no se está llevando a cabo en Aragón porque las tasas de esta enfermedad han sido muy bajas en los últimos años y la estrategia de vacunación parecía la correcta, aunque sí se realiza en algunas otras comunidades españolas con tasas de tosferina más elevadas.
Junto a esta recomendación, Nuria García recuerda la importancia de vacunar cuanto antes a los bebés:en Aragón se aplica la dosis cuando los niños han cumplido dos meses. Asimismo, y con el objetivo de mejorar su protección y seguridad, apunta que la Sociedad se Pediatría de Aragón aconseja incluso vacunar a las embarazadas: "Esto ya se hace en EE. UU., Canadá y Reino Unido apunta. Vacunar a las madres a partir de las 27 semanas de gestación es una medida que recomendamos para que el bebé nazca con anticuerpos protectores frente a la tosferina".
Una enfermedad infecciosa. Al principio parece un resfriado más, pero deriva en una tos persistente que dura varias semanas, en forma de ataques que no dejan respirar (a veces se oye el típico gallo al coger aire). Con frecuencia estos accesos finalizan con vómitos.