El artífice de este enriquecedor proyecto cultural es Roberto Rodés."Tengo amistad con Emilio Gastón desde hace tiempo, y le propuse hacer una selección cronológica de sus versos y sentarnos a conversar sobre un poema en concreto –señala–. Emilio (Gastón) leía un poema y los recuerdos se le disparaban. Todo ese material lo fui grabando y, una vez editado, lo hemos incluido en un cedé doble: más de dos horas de grabación".

Una treintena de poemas y unos soliloquios que recorren una biografía de hombre sincero, comprometido y sin dobleces."Es una persona muy optimista, amigo de sus amigos, comprometido con la naturaleza y la sociedad;alguien que confía en el ser humano –subraya Rodés–. Lo único que he hecho ha sido grabar sus memorias y su poesía de la manera más cercana posible. He buscado que quien quiera disfrutar de estas ‘Poemorias’ sienta como si estuviera sentado conversando con el propio escritor".

El hilo narrativo se detiene en 1985 por razones de espacio y de coherencia argumental."Emilio Gastón nació poeta, empezó a escribir versos siendo muy niño y tiene mucha obra. Lo dejamos en la época en la que le propusieron para Justicia de Aragón por no pasarnos de las dos horas pero, también, porque su poesía está muy marcada por su vida y ese momento clave en su biografía cambió sus versos. Él, en sus poemas, siempre ha reflejado sus dudas, sus intenciones, sus preocupaciones, y eso se nota también en su etapa de Justicia".

En la grabación salen a la luz desde los paisajes de su juventud a la lucha por las libertades que desarrolló a lo largo de la Transición. Gastón cuenta mucho, pero no todo."El es un hombre muy inteligente –concluye Rodés–, y por lo tanto revela solo lo que quiere revelar. Yo no he buscado que se ‘desnude’ en los cedés, pero en ellos muestra con total trasparencia su forma de ser y sus pensamientos".