CONTRAPORTADAS

Una estríper que vale por dos

Empezó a trabajar en El Plata el mismo día de la inauguración. Así que, a pesar de su embarazo, Anita Dinamita no ha dejado de salir al escenario

Su espectáculo vale doble. Y no solo porque sea explosivo -su propio nombre artístico, Anita Dinamita, la delata-, sino también porque desde hace unos meses, en concreto seis, encara su número en El Plata con doble energía: la suya propia y la que su hijo le proporciona. Aún quedan tres meses para que nazca y el director artístico de la sala, Bigas Luna, ya lo llama 'Baby Plata'. El cineasta le ha confirmado que es "la primera estríper embarazada en España". Y el resto de la 'troupe del local zaragozano está casi tan feliz como la madre. "Los compañeros me miman mucho. Le cantan, le bailan… Además, mi pareja también trabaja aquí. Me encuentro muy arropada", explica Anita en el camerino.


Mientras se pinta los labios, coqueta, para la sesión de fotos, relata sus miedos y anhelos, como buena madre primeriza. Aunque dice que su trabajo ha cambiado poco desde que se enteró de la feliz noticia: "Lo supe cuando estaba de dos meses y seguí. Y hasta hoy. Mientras esté bien y con ganas…". Sin embargo, su estado de buena esperanza ha obligado a algunos cambios en los 'surreal' y 'grotesc' shows del Plata: su número ya no se realiza en medio de la sala, sino en el escenario, y sus apariciones se han reducido a las 20.00 y a las 23.00. "He tenido que bajar el ritmo", explica. Un ritmo que, a pesar de su prominente barriga, la mantiene en forma. "¡Pues será porque no paro, porque he engordado unos kilitos!", se ríe. Tras la baja por maternidad, su idea es volver al local y retomar su trabajo.


Cuando ya se ha cambiado de ropa, y las plumas y brillos dan paso a los vaqueros, Anita se transforma en Ana Belén Bornao, una joven zaragozana emocionada por el nacimiento de su primer hijo. Mientras apura un café, rescata de la memoria el día de inauguración. "Estaba de los nervios. Antes, había bailado en discotecas, pero nunca había hecho un desnudo", cuenta. También recuerda el primer día que su padre fue al Plata. "Estaba actuando y lo vi de frente. Me dije: 'Anda, mi padre'". A pesar del 'shock' inicial, la familia es fan. "Mis padres están contentos. Solo preguntan cuándo cogeré la baja".


Por lo de dinamita y la pasión con la que defiende su trabajo, podría considerarse la Agustina de Aragón del Plata. "No es algo burdo, sino un estriptis muy sensual", resume. Aunque el "guapa, guapa" siempre sale, su pericia sobre las tablas le ha merecido más piropos. El que más le gusta, cuando le gritan "¡Valiente!". Y lo que más le choca, "que ahora los hombres están más cohibidos y somos las mujeres las que más chillamos".


Se tomará las uvas sobre el escenario y, después, solo tiene un deseo para 2009: "Que todo salga bien, en El Plata, y en el parto. ¡Y que no duela mucho!".