HERALDO ABIERTO

Un traslado 'gratuito' que costó 917 euros

Gloria Carnicer critica la información dada en el hospital de Vinaroz a su madre, la cual fue llevada en ambulancia desde allí a Zaragoza tras sufrir dos fracturas.

Gloria Carnicer, de 46 años, denuncia la mala información que recibieron en el hospital de Vinaroz.
Un traslado 'gratuito' que costó 917 euros
ESTHER CASAS

La familia de Gloria Gregorio Aznar, de 69 años y que sufrió una caída a finales de junio en Peñíscola mientras estaba de vacaciones, denuncia la mala información y el trato recibido en el hospital de Vinaroz, donde fue tratada de urgencia por una rotura de cadera y otra del fémur derecho. La familia tiene que hacerse cargo de los 917 euros que costó un traslado en ambulancia de Vinaroz a Zaragoza que ella pagó y que ahora nadie le devuelve.


"En cuanto nos enteramos del accidente, fuimos de Zaragoza a Vinaroz para ver cómo estaba", cuenta su hija, Gloria Carnicer, de 46 años. "El médico nos informó de que teníamos dos opciones: o la operaban allí a la semana siguiente (porque tenía que bajar la inflamación) o la trasladaban a Zaragoza para la intervención", cuenta Gloria. Como toda la familia vive y trabaja en la capital aragonesa, optaron por la segunda alternativa.


"Nos indicaron que teníamos que ir a información y pedir el presupuesto de la ambulancia: 917 euros pagados en metálico", explica Gloria. Eran ya las 11 de la noche. "Al final, entre todos los hijos, y dada la casualidad de que antes del accidente mi madre había sacado dinero del banco, reunimos esa cantidad. Además, nos aseguraron que con la factura que nos enviarían al correo, podríamos ir al Salud aragonés y pedir la devolución del dinero", cuenta.


Gloria recuerda que hacia la medianoche se les entregó el alta voluntaria, que ellos firmaron, y abandonaron el hospital de Vinaroz para llegar al Clínico, en Zaragoza, hacia las 5.00. "Durante todo el viaje, con baches y curvas, mi madre fue ella misma agarrándose la pierna, porque ni siquiera la inmovilizaron", dice.


Gloria asegura que, una vez en el Clínico, el personal médico se sorprendió de que no le hubieran inmovilizado la pierna a la paciente ni le hubieran puesto una sonda, puesto que vino solo con un calmante como medicación.


No les devuelven el dinero

La mujer estuvo dos semanas ingresada en el hospital y otras tres sin moverse en su domicilio. Cuando llegó la factura, la familia acudió al Salud a reclamar el dinero. Allí, les dijeron que no podían hacer nada porque una ambulancia debe ser solicitada por un hospital y nunca por un particular. "A nosotros nadie nos informó de esto. Si lo hubieran hecho, no hubieramos solicitado la ambulancia por nuestra cuenta", explica.


Hace unas semanas enviaron varias cartas con su queja por la falta de información y el trato recibido tanto al director del hospital de Vinaroz como a los servicios de atención al paciente de las administraciones sanitarias aragonesa y valenciana. Desde Valencia aseguran que no consta ningún traslado de la paciente de Vinaroz a Zaragoza. "Claro, como nos indicaron que teníamos que pedir la ambulancia nosotros y que firmáramos el alta voluntaria...", protesta Gloria.


"Prácticamente, damos por perdidos los 917 euros, pero queremos dejar constancia de lo mal que se portaron con nosotros y evitar que esto le pase a nadie más", señala Gloria. Desde el Salud aragonés advierten a los pacientes de que los traslados siempre tienen que hacerse a través de los propios hospitales.