Ese café en el que los amigos desaparecen. Esa intimidad nocturna invadida por un agente externo. Situaciones cotidianas en las que 'se cuela' el teléfono móvil. Síntomas de una adicción que afecta a la mitad de los españoles pero de la que no todos son conscientes.

El psicólogo Domingo Calderón advierte que el síntoma se detecta cuando se deja de hacer ciertas actividades para prestarle más atención al móvil. Por ejemplo, una deficiencia a la hora establecer relaciones o en los estudios.Adolescentes

Un problema que repercute, principalmente, en los adolescentes quienes, al verse privados del teléfono, empiezan a tener conductas de agresividad, ansiedad o malestar. De hecho, según la última encuesta del CIS, el 51% de los españoles cree que el móvil es uno de los motivos por el que se producen muchos de los problemas familiares.

Para combatir esta dependencia varios centros públicos de Andalucía trabajan con los afectados enseñándoles a limitar y prevenir su consumo. Solo en esa comunidad un 25% de los jóvenes dedica más de tres horas al día a las nuevas tecnologías.

Una conducta patológica que llega a ser tremendista. Muchos en la calle creen que no pueden vivir sin el móvil. Prueben a apagarlo en determinados momentos y quizá se sorprendan de que la vida continúa.