El Mobile sin corbata

Elisabeth, Diego y Sixto integran la marea humana que cada mañana entra en el recinto ferial de L'Hospitalet donde se celebra el Congreso Mundial de Móviles, pero, a diferencia de la gran mayoría, no llevan corbata ni son expertos en telefonía móvil. Son tres de las 12.672 personas que ocupan los puestos de trabajos generados por el evento.

Además de tener un impacto económico en Barcelona y su área metropolitana cuantificado este año en 436 millones de euros, el Mobile World Congress (MWC) representa para varios miles de personas una oportunidad para complementar sus ingresos anuales o para abandonar, aunque sea por unos días, las listas del paro.

Es el caso de Diego, que, ataviado con un chaleco verde en el que se lee "Ask me", asume la tarea de un punto de información móvil. Ha sido contratado para cuatro días por una empresa que colabora con los organizadores del Mobile, la asociación GSMA.

"Creo que cuando acaben estos cuatro días tendré que apuntarme al paro, porque trabajaba en una empresa que estaba a punto de cerrar", ha explicado Diego, que se muestra "completamente satisfecho" con la experiencia del Mobile, aunque se trate de un contrato parcial.

Con 33 años, Diego tiene experiencia en la atención al cliente, ya que había trabajado en el sector comercial, lo que cree le ha ayudado a conseguir este trabajo eventual, además del hecho de hablar inglés, catalán y castellano.

El dominio del inglés también ha sido crucial para que Elisabeth consiguiera otro de los trabajos temporales del Congreso de Móviles. Es una de las personas que orienta a los congresistas sobre los menús que pueden probar en el gran restaurante self-service situado en el sótano del edificio ferial y que controla el acceso al comedor.

"Tengo 18 años y éste es mi primer trabajo tanto en el Mobile como en cualquier otro tipo de congreso. Estoy empezando la carrera de Psicología en la UB (Universitat de Barcelona) y hace pocas semanas dejé mi currículum en una empresa de azafatas de congresos. Mi sorpresa fue que pocos días más tarde me llamaron para ofrecerme este puesto", relata la joven estudiante.

Elisabeth también se muestra "encantada" con el empleo, que le durará cuatro días, aunque estos días no puede asistir a clase y tendrá que recuperar "los apuntes".

En el restaurante trabaja también como camarero Sixto, de 43 años, que ya es la tercera vez que repite en el Mobile, así como en otros congresos de Fira de Barcelona, que cuenta con él para eventos de pocos días a lo largo del año. Para Sixto, estos trabajos, aunque sean de pocos días, "son una oportunidad". El resto del año suele trabajar en un almacén y de camarero. "¡Ojalá Barcelona atrajera más eventos como éste!", exclama.

Diego, Elisabeth y Sixto se mezclarán estos días por los pasillos del Mobile con los 90.000 congresistas que asisten al evento mundial más importante de la telefonía móvil y que, presumiblemente, llevan vidas muy diferentes a las suyas.

Entre ellos, destacan directivos de las principales empresas del sector como Samsung, Nokia, Sony, HTC, Acer, Huawei, Intel o Microsoft, e incluso alguno de ellos tampoco lleva corbata, como es el caso del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.