Hide, los auriculares más pequeños del mundo y batería extra en un solo 'gadget'

Lo mejor de los Hide de Cellularline es su tamaño y la batería extra que ofrece su funda-cargador.

Hide, unos auriculares escondidos
Hide, unos auriculares escondidos

Los auriculares duales, estéreo, inalámbricos e independientes se están poniendo de moda. Marcas como Samsung, Apple o Energy Sistem tienen los suyos y funcionan muy bien, pero los más pequeños que hemos podido probar son estos Hide, del fabricante italiano Cellularline.

Con una singular forma de bala, los Hide son sorprendentemente cómodos y resisten bastante bien los movimientos bruscos de cabeza. Aunque no tienen resistencia al agua entre sus especificaciones, los hemos probado corriendo y entrenando en el gimnasio sin que sufran daño o dejen de funcionar a causa del sudor.

La batería roza las tres horas de reproducción de música y se recargan en la funda de forma circular en unos 60 minutos. La capacidad de la base –que es algo más grande que una galleta María y gruesa como una moneda de 20 céntimos– es de 2.100 mAh, lo que permite recargar has 15 veces cada auricular y también se puede transformar en una batería externa para cargar el móvil o la ‘tablet’ gracias a la salida USB.

Meterlos y sacarlos es cómodo y sencillo gracias a que están imantados y la funda prácticamente los succiona. Por desgracia, no se encienden al sacarlos de la funda, sino que habrá que mantener pulsado su único botón, que sirve también como control de reproducción y para responder y colgar llamadas.

Los dos auriculares Hide tienen Bluetooth 4.2 y se pueden usar de modo independiente, doblando así la duración de la batería. La conexión con el teléfono es estable, pero no lo es tanto entre los auriculares, sufriendo alguna desconexión que provoca que el sonido se escuche solo en uno de los dos.

El micrófono para las llamadas ofrece un sonido aceptable aunque algo metálico y no se lleva bien con el cierzo ni los ambientes ruidosos. En la reproducción de música la calidad no es mala para el tamaño del auricular, pero los agudos y graves a un volumen alto tienden a romperse.

Aunque los más melómanos preferirán unos auriculares de diadema y los deportistas unos que se sujeten mejor a la oreja, por 80 euros, los Hide ofrecen una diminuta solución para aquellos que quieran audio sin cables y un extra de batería para sus 'gadgets'.

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