Robo en el Museo del Mamut de Barcelona

El exdirector del Museo del Mamut de Barcelona detenido por el robo de varias piezas del centro se delató cuando poco después del golpe llamó a la dirección para exigir el pago de unos 100.000 euros a cambio de devolver los valiosos objetos sustraídos, según han informado fuentes próximas al caso.

Los Mossos d'Esquadra han detenido hoy como supuesto responsable del robo a Ramon G.A., de 45 años y nacionalidad española, que fue director del Museo del Mamut de Barcelona desde finales de 2009 hasta el verano de 2011.

Según las mismas fuentes, después de perpetrar el robo, el exdirector llamó a los actuales responsables del centro para exigirles el pago de unos 100.000 euros, una cifra bastante inferior al precio real de los objetivos robados, para devolver las piezas, entre ellas una veintena de colmillos de mamut de más de 10.000 años.

Al parecer, el detenido amenazó con que si no le compraban el material que había robado lo vendería por su cuenta a otras personas interesadas, con lo que el Museo perdería definitivamente este valioso material.

El robo en el Museo del Mamut de Barcelona ocurrió la madrugada del domingo al lunes, cuando el exdirector supuestamente accedió al local con un juego de llaves que aún conservaba en su poder, desactivó las alarmas del museo y posteriormente se llevó las grabaciones de las cámaras de seguridad.

Según han informado a Efe fuentes cercanas a la investigación, una de las hipótesis con las que trabaja la policía catalana es que el detenido actuara por venganza por alguna controversia de índole personal o económica con el dueño del Museo, una hombre de origen ruso que le relevó el verano pasado al frente del Museo por su hija.

Los objetos recuperados por los Mossos, que el ladrón escondió en un pequeño almacén de Cerdanyola del Vallès (Barcelona), son veinticuatro colmillos de marfil de Mamut, de entre 30 y 40 kilos cada uno, un cuerno de rinoceronte y un cono de piel, así como varias piezas más pequeñas y 600 euros en metálico.

Los Mossos han calculado el valor de estos objetos en entre 400.000 y 500.000 euros, si bien los actuales responsables del Museo lo cuantificaron tras el robo en un millón de euros.