COLGARON LA BRUTAL PALIZA EN INTERNET

Detenidas dos adolescentes por la agresión a una niña ecuatoriana en Colmenarejo

La Guardia Civil ha detenido en la última semana a dos chicas adolescentes y ha imputado a una tercera en relación a la agresión sufrida por otra menor de 14 años en la localidad madrileña de Colmenarejo el pasado 25 de julio durante las fiestas patronales, que fue grabada en un móvil y difundida a través de internet y SMS.


Según informaron fuentes de la Benemérita, los arrestos se efectuaron el pasado viernes y este lunes. Las detenidas son menores de entre 15 y 16 años, entre las que se encuentra la supuesta agresora y la que realizó la filmación, mientras que la imputada era una de las que jaleaban a la primera para que continuara la paliza.


Asimismo, los agentes del puesto de Galapagar han identificado a otras cinco menores relacionadas con los hechos, por lo que la Guardia Civil da por zanjada la búsqueda de las participantes, todas residentes en Colmenarejo, en el suceso y ha remitido el caso a la Fiscalía de Menores, que a partir de ahora llevará el asunto.


Los hechos


Los hechos tuvieron lugar el día de Santiago durante las fiestas del pueblo, cuando un grupo de menores de entre 14 y 16 años se llevó a otra menor de procedencia ecuatoriana a un descampado, donde "aprovecharon" para propinarle una brutal paliza y grabarlo con un teléfono móvil.


En las imágenes se puede ver cómo la agresora, de nacionalidad española, le propina numerosos puñetazos y patadas por todo el cuerpo a la víctima, mientras que es animada por sus amigas al ritmo de "mátala, mátala". Finalmente, la víctima queda inconsciente en el suelo mientras que sus agresoras se marchan entre risas.


La hermana de la víctima ha sido quien ha interpuesto la denuncia y el caso se está investigando, aunque por tratarse de una menor, el proceso debe de ser "muy discreto".


Por su parte, Movimiento contra la Intolerancia manifestó su creencia de que la adolescente que agredió en Colmenarejo a otra chica sudamericana pueda pertenecer a un grupo violento racista, ya que observando el vídeo se puede ver una "técnica de pelea depurada y una falta de compasión hacia la víctima".