Un resto neandertal cierra el círculo de la evolución humana en Atapuerca
Los últimos hallazgos confirman que la excavación incluye restos de todas las especies de homínidos desde hace un millón de años.
«En Atapuerca, tenemos el último millón de años de evolución de los homínidos en Europa». Con variaciones, esta frase es una de las más repetidas desde hace años por Juan Luis Arsuaga, José María Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell, los directores de las excavaciones de los yacimientos burgaleses. La coletilla que la acompañaba hasta ahora era: «Solo nos faltan los neandertales». Hasta ahora. Porque este lunes los investigadores anunciaron, en la rueda de prensa del cierre de la campaña de excavaciones de este año, que por fin han dado en Atapuerca con restos de la especie que nació y vivió en Europa hasta hace unos 40.000 años, poco después de que nuestros antepasados llegaran de África.
Lo anunció Carbonell, ataviado con su inseparable salacot, en la Trinchera del Ferrocarril ante una mesa con algunos de los restos más significativos recuperados este verano de las entrañas de la sierra burgalesa. Pero fue Bermúdez de Castro el que precisó que, en realidad, el ansiado fósil -los restos de un parietal humano- se encontró el año pasado en la llamada Cueva Fantasma. Aunque todavía está siendo estudiado, el fósil se corresponde con la especie hasta ahora perdida de la que todos los humanos no subsaharianos portamos alrededor de un 2% de genes, como legado de encuentros sexuales prehistóricos. «El parietal hallado en la campaña de 2016 puede pertenecer perfectamente a la población clásica de los neandertales», afirmó Bermúdez de Castro.
Un taller neandertal
Más fornidos y con mayor capacidad cerebral que nosotros, los neandertales vivieron en una Europa mucho más fría y posiblemente sucumbieron cuando nuestra especie, más avanzada tecnológicamente, compitió con ellos por los recursos. En Atapuerca, parece que vivieron, entre otros lugares, en Cueva Fantasma, una cavidad situada por encima de Gran Dolina, donde en 1994 se encontraron los restos de 'Homo antecessor', especie hasta entonces desconocida que vivió hace unos 900.000 años. Los trabajos en Cueva Fantasma se han centrado este año en su acondicionamiento para empezar a excavar en este «prometedor enclave» en 2018. En otro yacimiento, el de Fuente Mudarra, al aire libre, los investigadores han encontrado en una cata tal cantidad de herramientas de piedra hechas por neandertales que hablan del hallazgo de «un taller» y creen que habrá muchísimos más restos en la zona.
En la campaña de excavaciones de este verano, en la que han trabajado durante más de mes y medio 280 investigadores de 22 nacionalidades, también se ha encontrado en la Sima de los Huesos un fragmento de mandíbula que Arsuaga cree que puede formar parte del Cráneo 15. Es uno de los diecisiete cráneos encontrados en ese yacimiento y completarlo sería «una gran noticia», dijo el paleoantropólogo. Con restos de hace más de 430.000 años, la Sima de los Huesos, ubicada en el interior de Cueva Mayor, es el mayor yacimiento del mundo en número de fósiles del género 'Homo', con unos 7.000 restos de al menos veintiocho individuos encontrados desde 1984.
Arsuaga recordó que en la sierra de Atapuerca está 'escrita' la historia humana desde hace un millón de años hasta prácticamente la actualidad, y destacó el hallazgo este mes de un alfiler de oro de hace 3.000 años en el yacimiento de El Portalón de Cueva Mayor. Se trata, recordó, de la tercera pieza de oro que se encuentra en Atapuerca, donde en anteriores campañas se recuperaron una moneda árabe y una pulsera.
