Todos los teléfonos móviles vendidos en India a partir de enero de 2017 deberán contar con un 'botón del pánico' que permita al usuario llamar para pedir ayuda, según ha anunciado el Gobierno, en medio de la preocupación por la seguridad de las mujeres tras varios violentos crímenes y violaciones en los últimos años.

A partir de enero de 2018, los teléfonos móviles también deberán contar con un sistema de posicionamiento GPS, ha informado el Ministerio de Comunicación y Tecnología indio.

"El único sentido de la tecnología es hacer la vida humana mejor, y qué mejor uso que (...) para la seguridad de las mujeres", ha defendido el Ministerio en su comunicado publicado a última hora del lunes.

Mantener pulsado el número 5 o el 9 en los nuevos teléfonos móviles generará una llamada de emergencia, ha explicado el Ministerio. En el caso de los 'smartphones', la llamada de emergencia se realizará pulsando tres veces el botón de encendido en una rápida sucesión, ha precisado, sin dar más detalles.

La preocupación por la seguridad de las mujeres ha aumentado en India desde la violación grupal y posterior asesinato de una estudiante de 23 años en un autobús en Nueva Delhi en 2012. En otro caso muy sonado, un conductor de Uber fue declarado culpable de violar a una pasajera en la capital.

El incidente de 2012 generó protestas en todo el país y provocó el endurecimiento de la ley contra las violaciones. Pese a ello, India registró 337.922 delitos contra las mujeres en 2014, incluidas más de 36.000 violaciones, un 9 % más que el año anterior.

Algunos políticos y responsables policiales han llamado a que las mujeres den clases de autodefensa, que "se vistan de forma decente" y no salgan después de atardecer, provocando protestas por parte de las defensoras de los derechos de las mujeres.

Algunas firmas de venta online como Flipkart, Amazon India y Snapdeal están vendiendo productos que afirman están destinados a la seguridad de las mujeres. Estos incluyen espray de pimienta, porras y pintalabios con pistolas aturdidoras.

India es el segundo mayor mercado mundial de teléfonos móviles, con más de 1.000 millones de usuarios. Pero son los hombres quienes controlan su uso en las zonas rurales y en el estado occidental de Gujarat varias localidades recientemente prohibieron a las chicas y a las mujeres solteras poseer teléfonos móviles, argumentando que los artilugios las distraen de sus estudios.