Paleontología y ocio, sustento del desarrollo socioeconómico

Los dinosaurios de Teruel han sido hace poco protagonistas de una gran exposición en Tokio, que fue visitada por 270.000 personas. La Fundación Dinópolis acomete empresas de esta envergadura, al tiempo que desarrolla actividades "de presencia social de la ciencia" en localidades tan pequeñas como Concud (Teruel), donde promueve la instalación de murales cerámicos sobre fósiles locales. Luis Alcalá, gerente de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, habla así, con orgullo, de su "modelo de comunicación de los científicos con la sociedad".

Ganadora del Premio Tercer Milenio en la categoría Ciencia y Sociedad, la Fundación Dinópolis mantiene, según Alcalá, "contacto directo con la sociedad a través de talleres, charlas o presentaciones llevadas a cabo por sus propios paleontólogos". Geódromo, Geolodía, Dinotour, Paleonturología… son programas que ha creado específicamente para "acercar la ciencia a diferentes colectivos sociales con distintos grados de formación", subraya su director gerente. Y siempre está presente en las celebraciones del Día Internacional de los Museos, la Semana de la Ciencia y La Noche de los Investigadores.

Alcalá dice más: también la Fundación Dinópolis divulga el trabajo de los investigadores porque "la ciencia sustenta el desarrollo socioeconómico aragonés gracias a la paleontología aplicada al ocio". Y por estas razones decidió presentarse al Premio Tercer Milenio en la categoría Ciencia y Sociedad. Desde su constitución en 1998, la Fundación se ha ido consolidando en la sociedad mediante programas dirigidos a un amplio abanico de públicos, desde escolares de Infantil hasta universitarios, pasando por el ciudadano de a pie e involucrando a empresas privadas.Doscientos yacimientos

Su equipo de paleontólogos ha descubierto en Teruel más de doscientos nuevos yacimientos con dinosaurios y ha recuperado miles de huesos (8.000 sólo en Ariño), cuyos estudios se han publicado en revistas científicas internacionales, como el del dinosaurio gigante de Riodeva en la revista 'Science'.

Su consolidación dentro de la comunidad científica queda ratificada por las numerosas colaboraciones que hoy mantiene con investigadores del CSIC y de universidades españolas y extranjeras, como las de Lisboa, Pierre et Marie Curie de París, la Nacional Autónoma de México (UNAM), la China University of Geosciences (Beijing, China) y las americanas de Pennsylvania, Texas y Utah.

Los resultados de sus investigaciones han permitido describir dos nuevos grupos, siete nuevos géneros y nueve especies nuevas de vertebrados (dinosaurios, cocodrilos y tortugas) del Mesozoico, así como un nuevo género y cuatro nuevas especies de mamíferos del Cenozoico. ACCESIT / UCC Universidad de Zaragoza

Compartir el saber. Hacer visible lo que estaba oculto, despertar interés por cuestiones antes desconocidas y llegar a espacios hace años insospechados es a lo que se dedica la Unidad de Cultura Científica de la Universidad de Zaragoza, merecedora de un accésit de los Premios Tercer Milenio en la categoría Ciencia y Sociedad. Estos dos ámbitos estaban antes inconexos. La cercanía se debe en gran parte al trabajo de esta Unidad de Cultura Científica, cuya responsable, Carmina Puyod, lleva siete años "poniendo en valor el conocimiento que se genera en la Universidad de Zaragoza".

Puyod enumera las tareas de esta Unidad: "hacer visible el trabajo de los investigadores y acercarlo a los ciudadanos con formatos innovadores que logren emocionar; hacer que los científicos den pasos seguros en la divulgación de la ciencia, facilitándoles talleres de documentales, de monólogos, jornadas...; despertar el interés por la ciencia entre estudiantes de Secundaria, especialmente del medio rural, invitándoles a conocer los laboratorios de la Universidad de la mano de los propios investigadores; divulgar ciencia en espacios nada frecuentes, como las cárceles de Zuera y Daroca o el Hospital Infantil de Zaragoza, con actividades como el cine fórum; y ser catalizadores de los proyectos divulgativos que surjan entre los investigadores". ACCESIT / Fundación Ibercivis

La oportunidad del ciudadano. Hace pocos días, la Fundación Ibercivis llevó a cabo en la Universidad de Zaragoza uno de sus experimentos participativos de ciencia ciudadana. Tres generaciones de unas cuantas familias respondieron a preguntas y tomaron decisiones para un estudio científico sobre comportamiento social. Lo llamaron 'Ciencia en familia'. Es a lo que se dedica Ibercivis, a implicar al ciudadano en investigaciones científicas, y es por lo que ha ganado un accésit de los Premios Tercer Milenio en la categoría Ciencia y Sociedad, "por promover la ciencia ciudadana, que es algo innovador y muy provechoso", apunta Fermín Serrano, de la Fundación.

Es una fórmula que a todos beneficia: a los investigadores, y a las personas que participan, por la satisfacción de contribuir al desarrollo de la investigación, por lo mucho que aprenden sobre ella y porque llegan a "sentir la ciencia como propia", dice Serrano. En su opinión, Ibercivis (ya con más de 40 experimentos por los que han pasado 40.000 voluntarios), ha obtenido el accésit Tercer Milenio "por hacer mucho con poco". Ahora prepara el experimento Life Watch. Los voluntarios tendrán que analizar especímenes de plantas y animales para colaborar en un estudio científico sobre inteligencia emocional a través del reconocimiento que realiza el ojo humano.

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