​El Papa admite que a veces la separación es "inevitable y moralmente necesaria"

Francisco pide a los cónyuges que curen las heridas que se producen en las familias.

El papa Francisco I en una aparición reciente.
?El Papa admite que a veces la separación es "inevitable y moralmente necesaria"
Filippo Monteforte/Afp

El papa Francisco ha pedido a los cónyuges que curen las "heridas" que se producen dentro de las familias cuando se tratan mal aunque ha reconocido que hay casos en los que la separación puede ser "moralmente necesaria" cuando existe violencia.


"Es verdad que hay casos en los cuales la separación es inevitable. A veces puede volverse incluso moralmente necesaria, cuando precisamente se trata de sustraer al cónyuge más débil o a los hijos pequeños, a las heridas más graves causadas por la prepotencia y por la violencia, por el desaliento y por la explotación, por la ajenidad y la indiferencia", ha avisado.


Así lo ha expresado Francisco durante su audiencia general de este miércoles ante miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro del Vaticano.

El Papa ha indicado que en ninguna familia faltan los momentos en que "palabras, acciones y omisiones, en vez de expresar amor, lo quitan o, peor todavía, lo mortifican" y ha advertido de que si estas "heridas" no se curan, se agravan y se convierten en "prepotencia, hostilidad, desprecio".


Según ha añadido, estas heridas pueden transformarse incluso en "laceraciones profundas" que dividen a marido y mujer y les inducen "a buscar en otro lado comprensión, apoyo y consuelo" pero ha alertado de que, "a menudo estos apoyos no piensan en el bien de la familia".


Además, el Pontífice ha mostrado su preocupación por los hijos sobre los que "cae" el "resentimiento de la desunión" de sus padres y ha advertido de que "cuanto más se trata de compensar con regalos y dulces, más se pierde el sentido de las heridas del alma".

"No obstante nuestra sensibilidad aparentemente evolucionada, y todos nuestros refinados análisis psicológicos, me pregunto si no nos hemos anestesiado también con respecto a las heridas del alma de los niños", ha indicado.


En todo caso, ha apuntado que "no faltan, gracias a Dios, aquellos que sostenidos por la fe y por el amor a los hijos, dan testimonio de su fidelidad a un vínculo en el cual han creído, aunque parezca imposible hacerlo revivir".


También ha señalado que "no todos los separados sienten esta vocación" y que "no todos reconocen, en la soledad, un llamado del Señor dirigido a ellos. Entorno a nosotros encontramos diversas familias en situaciones así llamadas irregulares - no me gusta esta palabra - y nos hacemos tantas preguntas. ¿Cómo ayudarlas? ¿Cómo acompañarlas? ¿Cómo acompañarlas para que los niños no se vuelvan rehenes del papá o de la mamá?


El Papa ha saludado a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España y Latinoamérica y les ha invitado a pedir a la Virgen María que interceda por las familias, especialmente por aquellas que atraviesan dificultades, "para que sepan superar y sanar siempre las heridas que causan división y amargura".