La mayoría de las investigaciones indican que el temor al viernes 13 lo explican los hechos acontecidos tal día de octubre de 1307.

La Santa Inquisición arrestó en Francia a cientos de caballeros de la orden de los templarios acusados de realizar celebraciones paganas, y asesinó a la mayoría de ellos acusándoles de herejía.

Muchos estudios señalan, sin embargo, que el motivo por el cual el rey Felipe IV de Francia ordenó ajusticiarlos fue porque poseían una gran cantidad de dinero y tesoros, entre los que figuraba el Santo Grial.

Además, el número 13 está asociado a la mala suerte ya desde la Antigüedad. Son símbolo de mal augurio los trece apóstoles en la Última Cena de Jesucristo, en el Apocalipsis se habla del anticristo en el decimotercer capítulo y la Cábala, una de las disciplinas de la religión judía, nombra a un total de 13 espíritus malignos.

Muchas personas en el mundo padecen parascevedecatriafobia o collafobia, es decir, fobia al viernes 13. Este trastorno de ansiedad se produce por tener un temor irracional y muy fuerte a algo que representa poco o ningún peligro real.

De hecho, la superstición ha hecho que en la actualidad sean cientos los hoteles y edificios privados, especialmente en EE.UU., que pasan de la planta 12 a la 14 evitando nombrar la trece, y haciendo desaparecer dicho número de los ascensores.

El cine también ha ayudado a popularizar el sinónimo de este día con el terror y la mala suerte, con la saga de películas 'Viernes 13'. La primera cinta se estrenó en 1980 y forma parte de los films de terror adolescente que popularizaría el director Wes Craven con Pesadilla en Elm Street, primero, y Scream, ya en la década de los 90. 

En España, Grecia y algunos de los países de América, como Venezuela, Argentina o Chile, el día de mala suerte se traslada al martes 13. De igual modo, en Italia son los viernes 17 los denominados días de mal augurio.