Concha Velasco: "Quiero olvidarme de todo lo pasado y volver a los escenarios"

La actriz estrena la obra 'Olivia y Eugenio' sobre una madre con su hijo con síndrome de Down.

Concha Velasco junto al actor que interpreta a su hijo en la obra
Concha Velasco: "Quiero olvidarme de todo lo pasado y volver a los escenarios"
Efe

La actriz Concha Velasco, quien ha superado recientemente un cáncer, ha dicho que quiere olvidarse de "todo" lo que le ha pasado y volver a los escenarios, lo que hará con el estreno de la obra 'Olivia y Eugenio', un ajuste de cuentas con la sociedad de una madre con un hijo con síndrome de Down.


El próximo viernes, en el Teatro Principal, Concha Velasco (Valladolid, 1939) estrenará esta obra, que tiene como protagonistas a la veterana actriz y a Hugo Aritmendiz, un chico con síndrome de down que por primera vez actúa en una obra de teatro y que este miércoles, muy emocionado, ha agradecido que se le haya dado este papel.


Acompañada del autor de la obra, Herbert Morote, el director, José Carlos Plaza, el productor, Jesús Cimarro, y Aritmendiz, la actriz ha expresado en una rueda de prensa su agradecimiento por "poder volver a actuar, a pisar un escenario, volver a vivir otras vidas. Esta obra es muchas cosas", ha manifestado.


Olivia, el personaje que interpreta, "me ha cambiado mi manera de pensar y mi manera de ser", ha declarado Concha Velasco, quien ha enfatizado: "Quiero olvidarme en este momento de todo lo que me ha pasado", lo importante es 'Olivia y Eugenio'".


"Creo que he tenido la suerte de que me cogiesen en el hospital muy pronto, aunque llegue tarde... porque cuando estaba aquí (en Zaragoza) el año pasado, con (la obra) Hécuba, yo iba del escenario al hotel sintiéndome muy mal y no lo quería decir. Pero todo eso ha pasado", ha explicado.


Por ello, ha remarcado la riquísima vida personal de Olivia y ha emplazado al espectador a que vayan al teatro para ver a una mujer "entrañable", "endurecida por la vida" que ha tenido que afrontar en solitario un hijo con síndrome de Down, "un hijo mongólico, como se decía hace años", ha señalado.


Las familias que afrontan esta situación, como le ocurre al propio autor de la obra, que tiene un hijo de 45 años con síndrome de Down, se dan cuenta, ha dicho, que tienen "un ángel de bondad, de sabiduría y alegría, un eterno bebé, un eterno niño, un ser ingenuo que esta por encima de todos los demás seres de este mundo.


Eso cuenta 'Olivia y Eugenio, ha añadido Velasco, quien se ha referido al papel de Hugo Aritmendiz, del que ha destacado su entrega y profesionalidad en la primera vez que pisa un escenario y que, según ha desvelado, quiere ser bailarín y hacer un musical.

"Creo que soy su segunda madre" y se nota en la obra, ha agregado la actriz, quien ha reivindicado, frente "a los que promueven las guerras y destruyen al ser humano" a los seres puros como Hugo- Eugenio, que estará sobre el escenario zaragozano tres días.


Tras reconocer que ha tenido la suerte de poder decir a través de los personajes que interpreta lo que le "gustaría decir en cada momento", ha indicado que "ha sido maravilloso" las llamadas de compañeros, "incluso de los que no teníamos una amistad cercana" y el reconocimiento de la gente por la calle: "me siento muy querida".


Por ello, ha hecho hincapié en que tiene la responsabilidad de demostrar "una vez más", que su pasión es el teatro y que tiene "la suerte de tener una carrera impecable".


A Velasco le gustaría trabajar con su hijo Manuel. "No me quiere como actriz", pero "cuando vea esta obra se va a dar cuenta de que soy una actriz muy estimable".


También se ha congratulado de volver a presentar el programa de TVE 'Cine de Barrio', esas películas "estupendas tan denostadas en una época y que ahora se reivindican", aunque ha dicho que no se pasa la vida mirando atrás: "ni con ira, ni sin ira. Vamos, que no miro. Pero me encanta el cine del que he sido protagonista".


Sobre su situación, ha informado de que los médicos no le dejan que haga "más trabajos", sólo una representación teatral diaria, pero no quiere dejar "colgado" otra vez al productor Jesús Cimarro, quien ha vuelto a confiar en ella para hacer una obra "sabiendo lo malita" que ha estado.


"Me tengo que cuidar mucho; comer lo que me mandan; no ponerme afónica" y ya no puedo tomar ningún tipo medicación, ni cortisona, ni todas esas burradas que yo hacia cuando notaba que estaba afónica, cuando me dolía un pie", ha señalado.


"Le pido a Dios, soy creyente, aunque Olivia le pida cuentas a Dios porque se lo tiene que pedir, que me ayude a no defraudar a nadie esta vez y a no ponerme enferma esta vez. Y a la Virgen del Pilar", de la que es devota.