Cae una red dedicada a la caza ilegal y al tráfico de trofeos en Málaga

Tres personas han sido detenidas y otras veinte, imputadas.

Una red dedicada a la caza ilegal de cabra montés y al tráfico ilegal de trofeos ha sido desarticulada por la Guardia Civil en Málaga, en una actuación en la que han sido detenidas tres personas, una de ellas un empleado de la Junta y un guarda de coto de caza, e imputadas otras veinte.


Durante la operación, llevada a cabo en la Sierra Norte de la provincia, se han intervenido dieciocho trofeos de ciervo, cuatro de cabra montés, dos de gamo, uno de muflón, cuatro de jabalí y diecisiete artes prohibidas de caza, según ha informado este viernes el instituto armado en un comunicado.


La operación se inició el pasado octubre como consecuencia de la denuncia presentada por la Federación Andaluza de Caza, debido al aumento del furtivismo de la cabra montés.


En una primera fase se constató la celebración de varias jornadas de caza furtiva que habían sido organizadas por un guarda de coto de caza, quien, aprovechando su condición y uniforme, acompañaba a los cazadores incluso en época de veda y en distintos cotos privados de la Sierra Norte de Málaga para realizar prácticas furtivas.

Ofertaban cacerías, así como el uso fraudulento de los precintos de caza con los que legalizaban los trofeos obtenidos ilegalmente, y de los que se obtenían grandes beneficios económicos.


Con la ayuda de un técnico de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta, se pudo constatar en una segunda fase el cambio de un coto de caza menor a caza mayor sin el conocimiento y autorización de su titular, "aprovechándose que se trataba de una persona de avanzada edad y que residía fuera de Málaga".


Para conseguir dicho cambio, habían falsificado la firma del titular del coto, así como varios precintos para la cabra montés.


A los implicados se les imputan delitos contra la fauna, estafa, falsedad documental, usurpación de estado civil, y negociaciones prohibidas a funcionarios públicos.


La operación ha sido llevada a cabo por el equipo de protección de la naturaleza (Seprona) de la Comandancia de la Guardia Civil en Málaga en colaboración con los responsables del departamento de Caza de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta.