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Fran Rivera disfruta de El Rocío con su prometida

"No es que esté feliz, es que no me lo creo", asegura el ex torero.

Fran junto a su prometida, Lourdes
El Rocío, un camino que Francisco Rivera hacía con Carmina y ahora, con su prometida Lourdes
DIVINITY

Francisco Rivera y Lourdes Montes ya han iniciado el camino del Rocío. La pareja ha puesto rumbo a la aldea con la hermandad de Triana, a la que también pertenecía Carmina Ordóñez, gran protagonista durante años del popular peregrinaje. 


El de este año será un camino muy especial para Francisco y Lourdes, y es que será el último que recorran como solteros. La feliz pareja ya ha comenzado la cuenta atrás para su boda civil, ya que el torero aún no ha obtenido la nulidad de su matrimonio con Eugenia Martínez de Irujo.


Felices, enamorados y muy ilusionados con el enlace adelantaban algunos detalles de cómo será este día tan especial a la revista ¡Hola!: "Nos casamos el 14 de septiembre en Ronda, y mi hija, Cayetana, será la madrina", explicaba el hijo de Paquirri.


Además, ha añadido que Lourdes es la mujer de su vida: "Quiero formar con Lourdes Montes la familia que he soñado toda mi vida. No es que esté feliz, es que no me lo creo".


La pareja ha adelantado que no será un enlace tradicional y estará oficiada por Juan Ignacio Zoido. Un buen amigo de la familia, la cual han contado que quieren aumentar pronto. Según ha explicado Lourdes recientemente "ya tengo todo preparado" para la boda.


Mientras ese día llega, la feliz pareja ha iniciado el camino del Rocío, un camino en el que descansan las cenizas de Carmina Ordóñez. La lluvia no impidió que Francisco Rivera y Lourdes Montes pusieran rumbo a la aldea con la hermandad de Triana, en una de las carretas.


El torero se resguardó de la lluvia con un chubasquero verde, y también lucía un sombrero típico para la ocasión. Mientras que la abogada estaba radiante con un sencillo traje de gitana con pequeños lunares, una flor a juego en el pelo y zapatillas de esparto en rojo. Además no han querido emprender el peregrinaje sin estar acompañados de otro miembro de la familia, su mascota, un adorable perro de la raza bóxer.