Ciencia

Investigadores de Zaragoza hallan oro magnético en partículas nanométricas

Este hallazgo podría ser muy útil en el futuro como agente antitumoral por calentamiento local o en liberación de medicamentos, según ha informado la Universidad de Zaragoza en un comunicado.

Investigadores del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (ICMA) han descubierto, en colaboración con otros científicos españoles, franceses y alemanes, oro magnético en partículas nanométricas.


Este hallazgo, que ha sido publicado recientemente en la revista 'Physical Review Letters', podría ser muy útil en el futuro como agente antitumoral por calentamiento local o en liberación de medicamentos, ha informado la Universidad de Zaragoza en un comunicado.


La utilización de técnicas de radiación sincrotrón y muy bajas temperaturas han logrado demostrar la existencia de este fenómeno, hasta ahora, dudoso, han agregado las mismas fuentes.


Además, este experimento ha abierto nuevas perspectivas en la comprensión de los fenómenos cuánticos que dominan el comportamiento de pequeños aglomerados de unas decenas o cientos de átomos metálicos y que solo se manifiestan a temperaturas extremadamente bajas, próximas al cero absoluto (273,15 grados bajo cero).


El descubrimiento, que ha sido llevado a cabo por un equipo liderado por el profesor Juan Bartolomé, del ICMA, centro mixto de la Universidad de Zaragoza y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha sido posible tras un experimento realizado en el sincrotrón europeo ESRF (European Synchrotron Radiation Facility), localizado en Grenoble (Francia).


Se trata de un trabajo de colaboración internacional entre grupos españoles, como el ICMA o el Instituto de Nanociencia de Aragón (INA), y franceses y alemanes, que según la institución académica zaragozana "ha demostrado sin ambigüedad alguna la existencia de oro magnético en ciertas nanopartículas de oro".


Dicho efecto se había visto anteriormente en partículas de oro recubiertas con "tioles" (moléculas que contienen azufre), pero el fenómeno resultaba dudoso ya que la señal magnética era tan pequeña que podía confundirse como procedente de la presencia de otros elementos magnéticos, como el hierro, omnipresente en el entorno, han explicado.


La novedad del reciente descubrimiento radica en que para la detección de la señal magnética se ha utilizado la técnica de dicroísmo magnético de rayos X, que permite seleccionar al elemento que se desea estudiar, en este caso el oro y, por tanto, excluir cualquier otra interpretación.


Por otro lado, las partículas de oro se han obtenido mediante un original método bioquímico basado en la utilización de la membrana de un tipo de organismo unicelular, denominado "Sulfolobus acidocaldarious".


El oro es el metal precioso por antonomasia, que la humanidad lo ha utilizado como moneda o metal noble en que expresar riqueza y arte y, aunque quizás es uno de los metales mejor conocidos por esta causa, todavía presenta sorpresas, han subrayado desde la Universidad de Zaragoza.