Teatro Arbolé entrega sus Pelegrines de Plata

La Feria Europea de Teatro para Niños y el Festival de Títeres de Tolosa, galardonados.

Idoya Otegui, directora Festival Internacional de Títeres de Tolosa recoge el premio que entrega Teatro Arbolé
Idoya Otegui, directora Festival Internacional de Títeres de Tolosa recoge el premio que entrega Teatro Arbolé
Luis Simón

Este sábado han comenzado las actividades organizadas para celebrar los 25 años de programación del Teatro Arbolé. La primera de ellas ha sido el estreno de la obra 'Kikiriguau', una coproducción de Títeres Sin cabeza y Arbolé para el público infantil, niños a partir de 12 meses, un espectáculo de iniciación al teatro que ha gustado mucho al público familiar. Sin palabras, con el idioma de los animales, un cuento fabuloso y una fábula de cuento que ha divertido y emocionado a los más pequeños, porque en 'Kikiriguau' no se habla. Se ladra, se maúlla, se cacarea, se pía... desde que empieza el día hasta que acaba. O mejor dicho, desde que canta el gallo para despertar al sol, hasta que el lobo aúlla a la luna. Y ya sea primavera, verano, otoño o invierno, entre picos y patas, cerdos y gatos, todos los animales chapotean, ríen, juegan, comen y aprenden. Porque todos somos diferentes y tenemos que aprender los unos a los otros para poder crecer.


Tras la función de la tarde se han entregado los “Pelegrines de Plata”, que este año se han concedido a FETEN (Feria Europea de Teatro para Niños) y al Festival Internacional de Títeres de Tolosa; y se ha inaugurado una exposición sobre las diferentes técnicas de manipulación de los títeres a través de las obras producidas por Teatro Arbolé y de los muñecos que las han protagonizado. Todos ellos forman parte de una escenografía que representa un bosque al revés, en homenaje a la célebre obra “Alicia en el país de las maravillas”, de Lewis Carroll, que este año celebra el 150 aniversario de su publicación.


El 4 de mayo de 1990, la compañía zaragozana Teatro Arbolé, que nació en 1979, inauguraba la Sala Arbolé en el barrio zaragozano del Actur. El primer grupo profesional de Aragón dedicado en exclusiva al teatro para niños, se convertía también en la primera compañía aragonesa en abrir su propio teatro. En julio de 2008 trasladó sus instalaciones al actual Teatro del Parque del Agua.