Fallece el pintor Eloy G. Laguardia a los 87 años

Integró, entre 1948 y 1951, el Grupo Pórtico con Santiago Lagunas y Fermín Aguayo.

Eloy Giménez Laguardia
Fallece el pintor Eloy G. Laguardia a los 87 años

El Grupo Pórtico (1948-1951) es uno de los colectivos claves de la historia del arte contemporáneo. Fue pionero de la abstracción en España, desde Zaragoza, y, tras el grupo inicial de nueve artistas, se redujo a tres: Santiago Lagunas (1912-1995), Fermín Aguayo (1926-1977) y Eloy Giménez Laguardia; este, nacido en Zaragoza en 1927, acaba de fallecer en San Sebastián a los 87 años.


Eloy Giménez Laguardia rompería lazos con el pasado aunque no dejaría nunca de pintar. En 1952, tras casarse con una hermana de la esposa de Santiago Lagunas, residió seis meses en Madrid y luego fijó su residencia en San Sebastián, donde llevaba una vida retirada; en los últimos años, además, se entregó a los cuidados del cáncer de su esposa, “con la que vivió una intensa historia de amor”, tal como narran allegados y amigos. Se había ganado la vida como diseñador en una empresa de electricidad.


Eloy Giménez Laguardia estudió en el Colegio Gascón y Marín; luego realizó varios cursos en la Escuela de Artes y Oficios y finalmente ingresó, como aprendiz de delineante, en Maquinaria y Fundiciones del Ebro. Allí coincidiría con Fermín Aguayo, un burgalés que había huido de la guerra civil, que sería su gran amigo; volverían a encontrarse en el servicio militar. Pronto entrarían en contacto con Lagunas, el teórico de 'Pórtico', un proyecto pictórico alimentado por Pepe Alcrudo desde su quiosco de Independencia.

Eloy Giménez Laguardia, Eloy G. Laguardia, participaría en las grandes exposiciones de 'Pórtico': en la galería Buhholz, en Madrid, en 1948; en Alerta, Santander, 1949; en la remodelación del cine Dorado, en 1949; en el I Salón de Pintura Moderna, en la Lonja de Zaragoza, 1950; en el Centro Mercantil, 1950; en la galería Studio de Bilbao o, entre otras, en la colectiva de la Lonja de 1952. Laguardia asumió el credo estético de 'Pórtico', su sentido de la innovación, su simbolismo, sus signos (la cruz, el círculo) y su libertad visual, y realizó una obra sólida, con óleo y goauche, de gran impacto.


Santiago Lagunas, con motivo de su antológica en la Lonja, comisariada por Manuel Val, dijo: “Eloy Laguardia era el más hondo de los tres, quizá porque había sufrido mucho. Su pintura era triste, muy triste”. En 1992, en el Mixto-4, el prolpio Manuel Val le organizó su primera exposición individual. También figuró en de 1993-1994 que organizaron Concha Lomba y Gonzalo Borrás en la Lonja. Y Dolores Dúcar también lo incluyó en 'La puerta abierta: el inicio de la abstracción. Grupo Pórtico y Grupo Zaragoza'. (Ibercaja, 2010).


“Intenté contactar varias veces con él. Fui a San Sebastián, le llamé, pero fue imposible. Estaba volcado con los cuidados de su mujer. Los años de 'Pórtico' fueron los más brillantes, sin duda. Realizó una pintura intensa, personal, de gran fuerza”. Manuel Val afirma: “Se impregnó del misticismo de Santiago Lagunas y realizó obras de gran profundidad, pureza pictórica, sinceridad de corazón, a pesar de no poseer una gran técnica pictórica".