Abrazar la obra de Ruizanglada

Uno de los hijos del pintor recopila y cataloga su vasta producción en un trabajo que pretende dar difusión a su legado fuera de Aragón.

'La Piedad', de Ruizanglada.
Abrazar la obra de Ruizanglada

“Ya le decían a mi padre en vida que su obra no estaba lo suficientemente reconocida fuera de Aragón, y por eso estoy trabajando, para que se sitúe en buenos sitios y tenga un valor reconocido antes de que yo muera”. Javier Ruiz Cortés, uno de los hijos del artista Martín Ruiz Anglada, -conocido en el ámbito artístico por la fusión de sus dos apellidos, Ruizanglada-, está inmerso en la ardua labor de recopilar toda la documentación posible sobre la prolífica producción del artista y difundirla fuera de nuestras fronteras.


“Calculo que mi padre pudo pintar no menos de 2.400 cuadros, y hasta ahora tengo registrados unos 900”, explica Ruiz, una recopilación documental que está siendo posible gracias al ‘llamamiento’ realizado entre galeristas, críticos, medios de comunicación y redes sociales, con el objetivo de que propietarios de sus obras aporten trabajos no conocidos del artista. “A través de este llamamiento general ya han aparecido 26 cuadros, pero podrían llegar a aparecer algún que otro centenar en Zaragoza, de obras no registradas, ya que el principal grueso de su obra lo vendió en Aragón”, comenta Ruiz. También hay obra del pintor repartida en territorio nacional, “y en Estados Unidos dejó unos 40 cuadros”, fruto de la estancia temporal del artista en Monterrey (California) en 1980, cuando expuso en la encantadora ciudad costera de Carmel-by-the Sea.


Estas obras ‘redescubiertas’ se van colgando poco a poco en una página web, donde además se puede encontrar un catálogo on line por la temática que marca el legado del pintor: la obra religiosa y espiritual, taurina, sus características representaciones de joteros, bodegones, paisajes y otros motivos. También se encuentra abundante información biográfica y documentación sobre sus exposiciones y trayectoria artística.


Ruiz explica que entre las obras que le han llegado en esta búsqueda se han encontrado telas de todas las épocas del pintor, desde uno de sus monjes cartujos de sus últimos años, a curiosidades como el óleo ‘Cerezos’, un paisaje que pese a ser de su primera época, cuando el artista daba sus primeros pasos como profesional, es “un presagio de lo que podía llegar a alcanzar con su pintura años más adelante. Tiene un valor artístico muy importante”, valora.


Ruiz Cortés ha encontrado en el soporte on line un buen aliado para difundir el legado de su padre y para entablar conversaciones con amantes del arte que aprecian la pincelada difusa, penetrante y espiritual que caracteriza a su obra. Como primer paso, generando una completa ficha del artista en Wikipedia, y después a través de redes sociales. En Facebook cuenta con más de 3.900 seguidores de todo el mundo: “Hay una parte importante de seguidores diarios de Taiwán que se están mostrando muy interesados por el arte religioso”, apunta Ruiz, temática esencial de su corpus pictórico y plasmada desde su personalísima técnica pictórica y vivencia de la espiritualidad.Obras en la exposición de Santa Teresa de Jesús

No en vano, tres obras de Ruizanglada pueden verse actualmente en la exposición ‘Con los ojos del alma’, organizada con motivo del V Centenario de Santa Teresa de Jesús en el Monasterio de San Bernardo de Alcalá de Henares hasta junio de 2015.


La muestra cuenta con obras clásicas y diversos objetos religiosos cedidos por varias diócesis, y las tres obras contemporáneas del pintor, una de ellas la tela ‘Santa Teresa de Jesús sobre la ciudad de Ávila’, que sirve además de imagen anunciadora de la muestra.


Por su parte, Ruiz Cortes trabaja para poder realizar una gran retrospectiva en Madrid en su empeño de difundir el legado de su padre, “más que como un deseo como una responsabilidad de hacer lo que mi padre no hizo, que es haber salido más de Aragón”.


Ruizanglada nació en 1929 en Milmarcos (Guadalajara), si bien vivió en Zaragoza desde niño, donde ejecutó su gran corpus pictórico. Fue académico de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla, y académico de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis de Zaragoza. Falleció en diciembre de 2001.