El guionista y director Jorge Riera, valenciano afincado en Zaragoza, ha elegido la capital aragonesa para la presentación oficial de su publicación 'Putokrio', un cómic en el que Riera, narrador de su propia vida con toques de hipérbole y crítica social, ha reunido a algunos de los mejores dibujantes de cómic del momento como Álvaro Ortiz, Darío Adanti, Natacha Bustos, Juaco Vizuete o Miguel Ángel Martín, confabulando una obra de estilos dispares y micro historias; un puñado de “viñetas autobiográficas plagadas de humor negro que van directas al estómago, donde más duele”.

Riera ha trabajado en cadenas de renombre como 'Paramount Comedy', 'Nickelodeon' o 'Canal Plus' y ha sido guionista en programas como 'Cámera Café', 'La isla de los nominados', 'Plaza de España' o 'La noche + corta'. Actualmente dirige la serie de animación protagonizada por 'Putokrio' -doblado por el actor de Oregón Tv, Luis Rabanaque- en el programa de La 2, Alaska y Coronas. La presentación tendrá lugar este sábado a las 19.30 en el Armadillo Ilustrado (calle Las Armas 74).

- ¿Qué cuenta Putokrío?

- Es el retrato de un personaje cargado de vicios, defectos y miserias desde su infancia hasta su (in)madurez. Y ese retrato se hace a partir de un puñado de historias cortas escritas por mí e ilustradas por 25 de los mejores dibujantes de cómics de nuestro país, entre ellos algún aragonés ilustre como Álvaro Ortiz., autor de 'Cenizas'. También es la séptima reencarnación de un proyecto que ha tenido muchas vidas en los últimos 15 años: un webcómic, un guion de largometraje que nunca se llegó a rodar, una serie de cortos de animación para el programa 'Alaska y Coronas' de La 2...

- ¿Por qué ese nombre a su obra?

- Porque es el mote por el que me conocen mis amigos de la adolescencia y porque el personaje es un Peter Pan condenado a la inmadurez. La 'k' especifica el espíritu transgresor y paródico de la obra. Además es un nombre corto e impactante, mi propia marca. Cuando Andrés Vicente Gómez, el productor de 'Torrente' y 'El día de la bestia', me llamó para intentar adaptar mis cómics al cine, me dijo que lo que más le había gustado de ellos era el título: le parecía perfecto.

-¿Por qué ha elegido Zaragoza como lugar de presentación?

- No soy muy amigo de los actos públicos, así que en principio solo se presentará aquí. ¿Por qué? Porque es mi ciudad de adopción, el sitio donde conocí a mi actual pareja y el lugar donde espero pasar los próximos años de mi vida. Aunque suelo trabajar para canales de televisión, productoras y revistas de Madrid y Barcelona, esta es mi nueva base de operaciones desde la que espero llegar a dominar el mundo. Me gusta esta ciudad, sus gentes y sus bares. Se come bien y se bebe mejor. Además, Buñuel es uno de mis principales referentes y qué menos que volverme aragonés como él.

- ¿Qué tiene de usted su obra?

- Creo que bastante, se trata de una colección de historietas pseudo-autobiográficas protagonizadas por un personaje hecho a mi imagen y semejanza. Con él comparto muchas similitudes, familiares, profesionales, sentimentales... pero no deja de ser una ficción porque en el momento en que juego a transformar mi vida en historias he de someterme a ciertas reglas narrativas y estilísticas para que todo funcione y se consiga atrapar al lector.

- ¿Una imagen vale más que mil palabras?

- En este caso mi espíritu está dividido. Soy guionista y mi trabajo se basa en la palabra, pero también he hecho las veces de realizador audiovisual y director de programas de televisión, por tanto estoy acostumbrado a trabajar con la imagen y apreciar su poder de persuasión. Además todo lo que escribo suele estar destino a convertirse en imágenes. Pero la palabra es siempre la base. Con un buen guion y un mal director que estropee tu guion se puede hacer una película regular, pero con un mal guion, por muy bien que se haga al transformarlo en imagen, es imposible conseguir una película decente.

- ¿Qué hace a esta obra diferente del resto dentro del mismo género?

- Por un lado el formato de historias cortas y la cantidad de dibujantes. Por otro, el tono, que es bastante personal y parte de una forma de verme a mí mismo y a lo que me rodea bastante absurda y sincera. O al menos es lo que creo... También creo que la mezcla de géneros que empleo es bastante particular. Aunque principalmente nos movamos en el terreno de la comedia también coqueteo con el terror, el melodrama, el fantástico...

- ¿Qué le diría a quien cree que es un género muy encasillado?

- Que no hay géneros encasillados, sino autores perezosos, aburridos y maniqueos. Sé que mi cómic no es perfecto, si pudiera volver atrás hay muchas cosas que cambiaría, pero de lo que nadie puede tacharme es de no arriesgar. Prefiero las obras fallidas pero valientes, que las redondas pero arquetípicas.

- ¿Cómo se inicia en el guion?

- Yo soy totalmente autodidacta y creo que eso me ha dado un punto de libertad que quizá no tengan otros. Empecé haciendo fanzines en la década de los 90 y enseguida tuve la suerte de profesionalizarme al dirigir la primera revista sobre manga y animación japonesa que se editó en nuestro país. De ahí pasé a guionizar cómics y de ahí a escribir para series como Cámera Café o canales como Boing. Todo lo que sé es gracias a mi experiencia y algún que otro manual de guion...

- ¿Cuál es el siguiente paso?

- Aún tengo muchas historias de Putokrío por contar, tanto en viñetas como en televisión, así que no tardaré en ponerme a escribir la segunda parte del cómic. También estoy en conversaciones con uno de mis directores españoles favoritos para que escribamos juntos su siguiente película. Te puedo adelantar que será una comedia y que la protagonizarán dos de los mejores actores cómicos de este país.