Borja rinde tributo al mejor jazz

Hasta la bandera. Así arrancaba este jueves la agenda de actividades enmarcadas en el festival ‘Borja en jazz’ que ha reunido a más de un centenar de personas en la antigua iglesia del Convento de Santo Domingo, actual Auditorio Municipal. Chus Fernández, David Fernández y Xavi Naval han sido los encargados de inaugurar el festival, seguidos de la actuación de la Agrupación Musical Borjana -apodada como la ‘Big Band de Borja’-.

Desde el Ayuntamiento de Borja han valorado muy positivamente el éxito de convocatoria de esta primera jornada, “sobre todo al ser un día entre semana”, afirma Carlos García, concejal de Cultura, quien ha asegurado que esperan seguir “igual de arropados durante las tres jornadas restantes”. 

La muestra, que fue rescatada el pasado año tras un parón entre 2011 y 2014 nacería en 1996 como homenaje a la figura de Miguel Ángel Bordejé, fallecido en un accidente de tráfico el año anterior. Año tras año se caracterizó por invadir cada rincón de Borja de música y color, algo que han querido mantener en esta nueva etapa. “Lo difícil no es que surgiese, sino que se haya hecho el esfuerzo para que se mantenga y para seguir apostando por contar con los mejores artistas del momento”, asevera Chus Fernández, director artístico de la muestra.

La voz también tendrá un espacio fundamental durante estos días, representada por la fuerte tradición coral de la mano del Certamen de Borja que cumple 35 años, y con una sesión de góspel de la mano de la directora de coro Pahola Crowley que “traerá un septeto formado por cuatro voces y tres músicos. Queremos que sea este gran instrumento el que cierre el ‘Borja en jazz’”; explica Fernández.

Por supuesto, habrá espacio para el talento local –con la E.N.M. Big Band y la Broken Brothers Brass Band- sin olvidar el internacional, representado por artistas de la talla de Mike Kanan y Jorge Rossi.

Además, este año es muy especial para los amantes del jazz de todo el mundo ya que se cumplen 100 años desde la aparición del primer álbum reconocido como oficial de la mano de la Original Dixieland Jazz Band. Sería el 7 de marzo de 1917 en los bajos fondos de Chicago, justo en un momento en el que se concebía como un estilo musical marginal y perseguido en Estados Unidos. Durante estos días Borja alberga la muestra ‘100 años de grabaciones de Jazz’ en la Casa de Aguilar.

Precisamente, el surgimiento de esta manera de vivir la música se remite a los bajos fondos de Nueva Orleans. “Nace en concreto en el barrio francés, al principio en la intimidad de algunos locales, aunque pronto empiezan a proliferar bandas callejeras que acompañan a todo tipo de actos”, explica Chus Fernández, director artístico del festival.

Por eso, y aunque se trata de un estilo que sufriría una fuerte evolución con el paso del tiempo, Fernández asegura que nunca perdería este origen de calle. “El jazz se divide en cuatro patas fundamentales, el de club, el de calle –conocido como New Orleans o Dixieland-, el góspel y el blues. Todas ellas estarán este año en el ‘Borja en Jazz’”, añade.

“Lo difícil es decir te quiero con pocas notas”

Sin duda, uno de los actos más importantes de la muestra, que pondrá su broche final el próximo domingo, será el homenaje a dos grandes del jazz a nivel internacional, el que es considerado como “el mejor bajista del mundo”, Jaco Pastorius y el conocido Tete Montoliu, que tendrá lugar este viernes 28 a las 17.00 en el Monasterio de Veruela. “Montse García-Albea, la que fue su compañera en vida, recibirá un cuadro donado por el pintor Fernando Moles titulado 'El piano infinito'”, añade Fernández.

Precisamente el artista cerraría su carrera profesional en Veruela: “Interpretó un repertorio en piano solo, parece cosa del destino ya que siempre lo hacía con su trío. Además nos mandó un mensaje que decía “Virtuosísimo. Lo difícil es decir te quiero con pocas notas”, el mismo que aparecerá en la placa que colocaremos en el Cine Cervantes”, explica el director artístico.