El Instituto Cervantes descubre "los secretos del arte español en Roma"

Organizará 4 visitas a galerías de la capital en las que se podrá observar cómo los pintores españoles no se limitaron a importar lo aprendido en Italia durante el Renacimiento.

La escalinata de la Plaza de España de Roma
La escalinata de la Plaza de España de Roma

La influencia que grandes pintores como El Greco, Diego Velázquez o Esteban Murillo recibieron del arte del Renacimiento italiano y la que ellos, a su vez, le aportaron se podrá descubrir en una serie de visitas organizadas por el Instituto Cervantes en Roma.

El taller se llama 'Los secretos del arte español en Roma', comienza mañana y termina el 1 de abril, y está organizado por la biblioteca 'María Zambrano' -que dirige Begoña Colmenero- del Instituto Cervantes.

Su objetivo es "revalorizar la contribución de los pintores españoles" a una de las épocas más estudiadas de la historia del arte, explicó la guía oficial de Roma Daniela Matteucci.

Los amantes del arte que quieran sumergirse en este viaje podrán hacerlo mediante cuatro visitas a tantas otras galerías de la capital italiana: las nacionales de Villa Borghese, Palacio Barberini y Palacio Corsini, y la privada de Doria Pamphilj.

Roma cobija obras de algunos de los artistas españoles más importantes y, sin embargo, "la pintura española en Italia no se conoce como se tendría que conocer", reconoció Matteucci.

"Los españoles añadieron su sensibilidad, más fuerte y calurosa, a los pintores y a la realidad italiana del Renacimiento, no se limitaron a importar a España lo aprendido en Italia", recordó.

En este sentido, puso como ejemplo a El Greco (Candía, Creta, 1541-Toledo, 1614), del que el taller visitará dos de sus obras, 'La adoración de los pastores' y 'El bautismo de Cristo'.

"De El Greco todos han escrito, todos se han ocupado de él, pero es un pintor tan particular que ni siquiera hoy en día se entiende cómo fue la relación verdadera con sus obras", opinó.

"El Greco no tiene relación histórica ni con su país, ni con España, ni con Italia (...), es una parábola, es una historia distinta de toda la historia del arte europeo", añadió.

Si El Greco pasó media vida en España y también viajó a Italia, otro de los autores estudiados en el taller, Esteban Murillo (Sevilla, 1617-Cádiz, 1682) nunca salió del país para visitar Florencia, que en la época era la capital del arte.

Sin embargo, según Matteucci, esto no fue inconveniente para que Murillo añadiera su particular aportación a la historia del arte con su 'Virgen con el niño', obra custodiada en la galería del Palacio Corsini.

Este cuadro refleja cómo el sevillano "se basó en la visión de las obras italianas que reflejan con mayor sensibilidad la pintura religiosa en este país".

El taller también contará con el privilegio de visitar una de las pocas joyas firmadas por Pedro Machuca (Toledo, 1490 ca.-Granada, 1550), "Virgen con el niño y San José", cuadro que se encuentra en la Galería Nacional de Villa Borghese.

En esta galería, los asistentes al taller también podrán admirar otros dos cuadros de Alonso Berruguete (Paredes de Navas, Palencia, 1490-Toledo, 1561): 'La Sagrada Familia' y 'Santa Ana'.

Las tres obras, apuntó Matteucci, reflejan cómo sintieron la pintura manierista florentina dos autores que pasaron buena parte de su formación en Florencia, antes de volver a España.

La última visita será a una galería privada, la Doria Pamphilj, donde se estudiará "la realidad histórica de los reyes y de los papas", un hecho importante en el desarrollo de las obras de los autores españoles de la época porque muchos "aprendieron la pintura italiana observando las colecciones de los reyes en sus palacios".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión