La Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) es el organismo que concede los títulos de Propiedad Industrial en el territorio nacional. Son susceptibles de ser patentados marcas y nombres comerciales, invenciones industriales, diseños y topografías de productos semiconductores.

El informe de 2014 de la institución situó a Aragón en el primer puesto de la lista de solicitudes por número de habitante, a una considerable distancia del resto de comunidades autónomas. En cifras: 153 peticiones por cada millón de habitantes, de las cuales se hicieron efectivas en Aragón un total de 205 patentes. Si el baremo tiene en cuenta el número absoluto de peticiones de patente, entonces Aragón se sitúa en el quinto puesto. Entre los inventos aragoneses destacan algunos que han alcanzado el mercado internacional.

La fregona

Uno de los más conocidos es la fregona, una adaptación de la herramienta empleada de la limpieza de barcos que patentó en 1968 el ingeniero aeronáutico y oficial del Ejército del Aire, Manuel Jalón. El nuevo utensilio permitía limpiar no solo más cómodamente, sino en una posición más decorosa.

Aunque nació en La Rioja, Jalón se crió en Zaragoza, donde pasó la mayor parte de su vida. Por su contribución a la sociedad con sus inventos el Ayuntamiento de Zaragoza le otorgó el premio Inmortal Ciudad de Zaragoza Salduba y lo nombró hijo predilecto de la ciudad.

La jeringuilla hipodérmica desechable

Del mismo Jalón es la jeringuilla desechable de 1975 que revolucionó el mundo. Su utilización permitió que disminuyeran el número de infecciones hospitalarias y que las vacunas pudiesen llegar al tercer mundo, por su bajo coste.

La olla exprés

La primera de todas fue patentada por el industrial José Álix Martínez, zaragozano, el 18 de octubre de 1919. Su número de patente fue el 71.143: "Una olla para toda clase de guisos que se denominará 'Olla Exprés' pudiendo construirse de cuantas formas y tamaños se desee".

El petróleo sintético

En 1934, Rafael Suñén recibió el visto bueno del consejo de ministros para sacar adelante su proyecto: un petróleo a base de la destilación de vegetales. Su invento no traspasó las fronteras por su agitada vida política en la convulsa época de la guerra civil, durante la que el aragonés desapareció.

El primer despertador electrónico

El 7 de mayo de 1976 Félix Lamarca, relojero de Alagón, sacó al mercado "el reloj electrónico más barato del mundo", tal y como lo calificó el periodista de HERALDO DE ARAGÓN, Alfonso Zapater.  

La pulsera Neki

Obra de la empresa zaragozana con el mismo nombre y cuya finalidad es poder localizar a un niño en caso de que se pierda. Este pequeño accesorio cuenta con tecnología Bluetooth y una batería de gran duración sin recarga (cerca de un año). Una solución sencilla si se prevé una gran aglomeración o salir a un gran espacio abierto.