La figura clásica de la criada sugiere una dedicación abnegada que, dentro de la diferencia de roles, motiva la confianza y el posible acercamiento emocional de la señora, vínculo alterado en ‘La doncella’ por los matices ocultos en ambas posiciones. El engaño, la turbiedad, el erotismo y el amor rigen la historia, desarrollada en los años 30 en Corea, en torno a una joven carterista que empieza a trabajar en la mansión donde vive recluida una rica mujer japonesa como parte del plan de un timador que se hace pasar por conde para quedarse con la herencia. La película envuelve, seduce y fascina al integrar belleza y perversidad, aspectos que Park Chan-wook canaliza mediante su poderosa composición escénica. La fuerza narrativa del director de la denominada trilogía de la venganza (la obra de culto ‘Oldboy’ fue la segunda entrega) y de la sutil y morbosa ‘Stoker’ se manifiesta en el modo en que transforma el relato desde la base argumental y la coherencia estilística con objeto de promover el cambio de percepción respecto a los hechos y al retrato de las dos mujeres (el del hombre no varía) y evocar distintas sensaciones.

Esa modulación se materializa en los giros aplicados en las tres partes en que se divide y tiene su dimensión más destacada en la carga sexual. El filme, basado en una novela de Sarah Waters y ganador del gran premio del público en el Festival de Sitges, articula apuntes de simbolismo explícito que ejercen magnetismo y transmite delicadeza y depravación según las circunstancias expuestas. La falsedad corrupta condiciona al principio la atracción, si bien después se incide en el drama latente bajo lo oscuro y en el deseo de vivir en libertad el sentimiento que ha surgido. La muerte expresada con sentido poético y la sensualidad de un momento íntimo reflejan los contrastes de un desenlace en el que Park Chan-wook exhibe su condición de autor.

‘La doncella’ 

Dirección: Park Chan-wook. Guión: Chung Seo-kyung y Park Chan-wook (adaptación de la novela de Sarah Waters).

Fotografía: Chung Chung-hoon. Música: Cho Young-wuk. Intérpretes: Kim Tae-ri, Kim Min-hee, Ha Jung-woo, Jo Jin-woong. Suspense y drama, 144 minutos. Corea del Sur, 2016.