Raúl Arévalo: "Cuento una historia entretenida de violencia seca y sin morbo"

“Estoy muy agradecido por la acogida de la película. La crítica se ha fijado mucho más en el riesgo, en la honestidad y en la entrega, que en los defectos”, decía Raúl Arévalo, que ha protagonizado la sesión 149 del ciclo 'La buena estrella', que coordina Luis Alegre en el Paraninfo, con la actriz Ruth Díaz, galardonada en el último Festival de Venecia.

“No he pretendido hacer una película nihilista ni dar un tortazo al espectador. He querido contar una historia, entretenida, sobre una violencia seca, austera, que huyese de la espectacularidad y del morbo”, agregó Raúl Arévalo. Asumió que en su debut hay conexiones claras con el western. “Sam Peckinpah está ahí, en el sustrato de la película, pero también películas de Carlos Saura como 'Los golfos' o 'La caza'. Y a la vez yo soy muy aficionado a las películas del 'espagueti western' de Sergio Leone”.

Raúl Arévalo es un actor que se ha pasado a la dirección y lo ha hecho con equilibrio, energía y sabia contención. “Creo que he acertado de lleno con los actores. Otra de las actrices de la película, Alicia Rubio, me habló de Ruth Díaz. Me dijo que la había visto en un corto, dirigido también por ella. No hubo castin ni nada. Me encantó. Y ahí está el resultado”.

Ruth Díaz está contenta. Tiene hondura y misterio. “En cuanto leí el guion me di cuenta de que era una maravilla. Mi personaje tiene muchos matices, diversos momentos, una psicología compleja”, dijo, y repasó un instante el argumento: es una mujer que madura en la ausencia, entre otras cosas porque queda embarazada en una visita a la cárcel.

“¿El premio de Venecia? La verdad es que no me lo esperaba. Me ha emocionado y me ha conmovido. Estoy muy agradecida. Cuando me lo dijeron, creo que no me lo creía y me puse a llorar”, concluyó. La sesión de 'La buena estrella' despertó tanta expectación que mucha gente se quedó sin poder entrar.