Txell Miras destaca en la pasarela 080
La cita barcelonesa se presenta en esta edición más comercial que creativa.
Txell Miras ha destacado este martes en la pasarela del 080 Barcelona Fashion, que está siendo, hasta ahora, más comercial que creativa, con una sólida y colorida colección de patrón y costura hecha en algodón, seda, viscosa, neopreno, y hasta con un tejido acharolado con el que ha abierto el desfile.
Con la salida de las primeras modelos vestidas de charol de color azul prusia, con pantalones pitillo, y con chaquetas y faldas asimétricas, ha marcado una diferencia que se ha ido consolidando con los vestidos, las camisas y los pantalones de tiro caído que le caracterizan.
Sigue poniendo estratégicamente bolsillos de plastón con solapa en las chaquetas y faldas, bolsillos delanteros de ojal con solapas en los pantalones y cremalleras para fruncir.
La novedad se ha visto en una mayor simplicidad de las líneas, como en los pantalones cortos en los que no hay costra trasera, y en el uso del color -blanco, verde, azul y gris- que se ha aplicado a su propia indumentaria.
Por primera vez, Txell Miras ha salido a saludar al acabar el desfile sin vestir de negro. Llevaba un pantalón caído con una veta negra como detalle de cinturón y una camisa de manga corta de un tejido adamascado de color verde.
Aunque las propuestas eran para la primavera-verano de 2017, algunos tejidos parecían más propios de invierno, y lo ha justificado diciendo a Efe que "como las colecciones entran en las tiendas en febrero y todavía no hace calor, hay que hacer cosas que abriguen un poco".
Josep Abril, que como Miras y Miriam Ponsa ya están consolidados tras años de ser considerados como las promesas del diseño catalán, ha desfilado después de Txell Miras con una colección de hombre más bien sobria en color azul marino y gris.
Bonito ha resultado también un traje-mono de pantalón corto con solapas de americana cosidas en los laterales de la camisa, que ha cerrado el desfile.
Miriam Ponsa ha hecho una colección inspirándose en los campos de arroz, en la que ha utilizado cintas para ceñir las prendas, inspiradas en las que llevan los arroceros para atarse las mangas y la parte inferior de las piernas.
Los bancales de los arrozales se han representado en la unión de los tejidos, creando formas orgánicas, aunque también se han utilizado gomas elásticas y superposiciones.
El paisaje de estos cultivos se ha construido combinando diferentes materiales y colores, una inspiración que Ponsa guarda en una agenda que ha enseñado a algunos escogidos en esta pasarela, y que le sirve para materializar estos conceptos en prendas de vestir.
Isabel Esteve, actual directora de diseño de la firma Sita Murt, que ha cerrado la jornada, ha mostrado una colección en la que ha jugado con el punto y tejidos que han dado como resultado texturas muy contrastadas.
En una colección con menos punto de lo esperado, ha jugado con linos, algodones, hilos rizados, y hasta con flecos mínimos en algunas costuras, que ha mezclado.
En las prendas ha mimado la espalda; en los vestidos las formas amplias y ligeras para escaparse del calor; y en los monos, sin mangas, ha puesto discretos escotes en V y marcado las cinturas caídas con una pieza de cinturilla.
Los colores más utilizados han sido el azul índigo, azul agua, ocre cúrcuma, rojo y tonos tierra naturales.
El 080 vuelve mañana con algunas marcas como Bóboli o Escorpión, y con las propuestas de Custo Barcelona, que presentará sus últimas tendencias.
