Una selección de esculturas figurativas de Belmonte se exhibe en el Pablo Gargallo
La selección de 28 obras de tamaño real del artista cordobés se puede contemplar hasta el 26 de junio.
Una selección de 28 esculturas figurativas, realizadas a tamaño real, del artista cordobés José Manuel Belmonte, se pueden contemplar en el Museo Pablo Gargallo de Zaragoza durante cuatro meses, hasta el 26 de junio.
'Emoción' es el sentimiento que ha reconocido sentir el artista al contemplar su obra expuesta en espacio museístico que alberga buena parte de la escultura de Gargallo, "a quien tanto admiro y a quien tanto he estudiado", ha indicado, para añadir que "estoy orgulloso de torear en Zaragoza porque es una plaza de primera y espero que mi obra guste a la gente".
En rueda de prensa, Belmonte ha explicado que en las "etapas de confusión se vuelve a la realidad porque hay que tomar referentes y eso pasa en el arte figurativo".
De esta forma ha apostillado la apreciación que el jefe de servicio de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Rafael Ordóñez, ha realizado de su obra cuando ha dicho que Belmonte "no es hiperrealista, sino figurativo y relativamente realista porque sus figuras reproducen la realidad del cuerpo, pero representan conceptos metafóricos y en situaciones que no son las de la vida real".
Rafael Ordóñez ha destacado que Belmonte pertenece a la "última generación de escultores que pudieron aprender con el uso de las herramientas y materiales tradicionales, siguiendo la línea histórica y que es fundamental para desarrollar cualquier tipo de tendencia posterior".
Anteriormente, el director general de Cultura, Saúl Esclarín, ha manifestado que la escultura de Belmonte "ataca la línea de flotación de las emociones porque su pulsión creativa queda perfectamente plasmada en los relieves y profundidad de sus obras porque nos refleja".Tres bloques
Para Esclarín, las figuras de este escultor "trasladan reflexiones que constantemente nos hacemos" y además de la "maestría técnica se puede vivenciar una experiencia vital viendo su obra".
La 28 piezas de la muestra están realizadas en resina de poliéster, menos una que emplea el mármol y se dividen en tres series, excepto cuatro obras que son un retrato (la única de mármol); una escultura que representa un "jaque mate, pero no se sabe si al tablero o a la vida del personaje"; el denominado 'Torso de Bea' que es un ejemplo de síntesis, ha dicho Ordóñez, quien también ha citado la obra 'Ánima se eleva' que es una figura humana levitando.
De los tres bloques, Ordóñez ha detallado que uno de ellos representa a tres hombres pájaro que "simbolizan el afán por levantar el vuelo y mirar más arriba".
El segundo, denominado 'Recreo de los ausentes' son ocho figuras de hombres mayores en actitud de personas desorientadas, que juegan con objetos de niños. "Es una instalación que gira en torno a la enfermedad del Alzheimer", ha acotado.
El tercer bloque son unos relieves en el que el tema que desarrolla el autor es el pecado simbolizado en la manzana y "representa la idea de la transgresión y de eliminar tabúes".
