El PP quiere que el pacto educativo que negocia con el Gobierno suponga una reforma en profundidad del sistema y propone, entre otras medidas, que se pueda pasar de curso con dos asignaturas suspendidas, si hay un informe favorable del centro, y ampliar un año el Bachillerato.

Así consta en el documento que el PP ha dado a conocer en un acto sectorial celebrado en Toledo, en el que el presidente del partido, Mariano Rajoy, y la secretaria general, María Dolores de Cospedal, han esbozado los principales objetivos de su propuesta.

Entre ellos, garantizar la formación básica común para todos los alumnos y el derecho a la enseñanza del castellano y en castellano en toda España.

El PP incluye entre los pilares fundamentales de su propuesta la mejora de la calidad educativa y de los rendimientos escolares, empezando por la enseñanza pública, así como la ampliación y garantía de la libertad de elección de centro y de tipo de educación, para lo que "los conciertos deben tener un marco más favorable".

También propone un currículo básico común para todo el territorio nacional, preservar el carácter nacional de los cuerpos docentes, la garantía de la enseñanza del castellano y en castellano en toda España, reforzar la autoridad del profesorado e incentivar la cultura del esfuerzo.

Entre las medidas que ha citado Cospedal está la inclusión de las evaluaciones externas de carácter nacional para las materias comunes, el fortalecimiento de la formación en inglés, la mejora de las tecnologías de la información, la modernización del sistema de becas y ayudas al estudio y la formación profesional ligada a la empresa.

Rajoy ha afirmado que su partido ha cumplido al presentar la propuesta y mostrar su voluntad firme de llegar a un acuerdo y ha dado un voto de confianza al ministro de Educación, Ángel Gabilondo, que "es una persona seria, más que el presidente del Gobierno; no hace falta que él se involucre en este asunto, basta con el ministro de Educación".