RECORTES EN SANIDAD EN CATALUÑA

Los médicos catalanes dicen que la situación es insostenible tras cerrar el 40% de los quirófanos

Han amenazado con convocar una huelga, aunque no quieren hacerlo por la repercusión que tiene en la asistencia de los pacientes y porque hay médicos con sueldos tan bajos, algunos mileuristas, que no lo pueden asumir.

Los delegados del sindicato Metges de Catalunya.
Los médicos catalanes dicen que la situación es insostenible tras cerrar el 40% quirófanos
EFE

Los médicos de los ocho hospitales del Instituto Catalán de la Salud (ICS) han alertado hoy de que la situación de la sanidad es "insostenible" debido al cierre del 30% de las camas y el 40% de los quirófanos por los recortes en Sanidad que lleva a cabo la Generalitat.


En rueda de prensa, los representantes de las Juntas Clínicas de los hospitales de Bellvitge, Viladecans, Josep Trueta de Girona, Vall d'Hebron, Germans Trias i Pujol, Arnau de Vilanova de Lleida, Joan XXIII de Tarragona, y Virge de la Cinta de Tortosa han hecho público un comunicado conjunto en el que aseguran que la situación de las listas de espera que ayer hizo pública el departamento de Salud es un "maquillaje" de la realidad.


Denuncian además que se han reducido médicos de guardia, lo que provoca una sobrecarga de pacientes a los especialistas, que repercute a su vez en la tutela de los médicos MIR en formación.


También piden al ICS que paralice estas medidas de ahorro, que reducen la excelencia de los centros, y busque alternativas de financiación que permita a la administración entregar a la sanidad, con urgencia, los 77 millones que necesita.


En este sentido, han propuesto que la sanidad reciba el mismo trato que bancos y otras empresas no públicas, financiadas en momentos de dificultad.


Además, han amenazado con convocar una huelga si esta situación no se soluciona, aunque no quieren hacerlo por la repercusión que tiene en la asistencia de los pacientes y porque hay médicos con sueldos tan bajos, algunos mileuristas, que no lo pueden asumir.


Han señalado además que no entienden cómo desde el ICS son tan agresivos con los profesionales sanitarios, que tienen el sueldo más bajo de toda España, y han pedido a los responsables que se pasen por los hospitales para ver las condiciones en las que trabajan.


Sobre las listas de espera que hizo publicas ayer el conseller de Salud, Boi Ruiz, han denunciado que desconocen los criterios con los que se han hecho porque la conselleria no ha hablado con los profesionales, y que los datos de junio en los que se basan no tienen nada que ver con la realidad de octubre, tras cerrar camas y bajar actividad.


María Teresa Fuentesalz, delegada de Médicos de Cataluña en Bellvitge, ha explicado que se han cerrado 100 camas, que se ha pasado de 35 quirófanos operativos a 29 -en agosto sólo funcionaban 14-, y que desde la puesta en marcha de los recortes se ha dejado de operar a entre 2.000 y 3.000 personas, que ahora están en la lista de espera.


Fuentesalz ha destacado que en el hospital se operaban de media a unos 100 enfermos diarios, y que ahora se intervienen a unos 40, y ha señalado que a la situación de colapso contribuye también el hecho de que las consultas externas sólo funcionan por la mañana.


En Vall d'Hebrón han cerrado 120 camas, desde abril se opera un 50% menos y se prevé que este año se dejen de realizar 5.000 operaciones quirúrgicas -cada año se hacían unas 40.000-, según ha dicho Roser Solans, representante de la Junta Clínica, quien ha revelado que se acumulan las pruebas diagnósticas y que hay 1.200 personas esperando un TAC para operar o por un control de oncología.


En prótesis de rodilla, en este centro la espera es de dos años, pero cuando entran en la lista llevan casi uno de recorrido, y el descenso de actividad alcanza al 40%, una reducción que además perjudica a los 500 profesionales que están en formación.


El hospital pediátrico del Vall d'Hebrón sólo opera urgencias y patologías tumorales, pero no realiza otras intervenciones, como a niños con riesgo de tener esterilidad por criptoquidia o testículo oculto, y algunos llevan hasta dos años de espera.


Según el portavoz del hospital Josep Trueta de Girona, hay pacientes que esperan hasta 407 días para una operación de columna, 1.848 para unas cataratas y 900 para un problema de otorrino porque los quirófanos se usan en oncología y otros patologías graves.


En el hospital Trias i Pujol se han cerrado 112 camas y se ha reducido la actividad quirúrgica un 2,49% este año. En el Virgen de la Cinta Tortosa el 32% de las 250 camas están cerradas y las intervenciones se han reducido un 68%.


En este centro, según datos de septiembre, se ha pasado de 6 a 13 meses de espera para operaciones de próstata y las artroscopias de 15,6 a 36 meses, y la situación es tan tensa, según el portavoz, que hay discusiones entre profesionales para ver quién usa el quirófano.


Jordi Martí, del Hospital Lleida, ha cifrado en 770 los pacientes pendientes de una intervención no urgente, y ha asegurado que pasarán años antes de que la situación pueda normalizarse.


El hospital de Viladecans, con 108 camas, pasó de 5 a 2 quirófanos activos en verano, y según los datos de los últimos seis años quirúrgicos, en trauma hay pendientes 2.000 operaciones, 570 del 2010 y 637 en lo que va de año. En urología había 77 casos en espera el año pasado, y este año ya hay 211, y muchos son de cáncer de próstata.