RENOVACIÓN DEL PSOE

El candidato del PSOE lo elegirán los ciudadanos y precisará menos avales

Los socialistas se proponen reformar el sistema de elección de los candidatos, pero también cambiar completamente el funcionamiento del partido.

Marcelino Iglesias
Marcelino Iglesias defiende que confrontar candidatos "no es una guerra", sino democracia interna
JOSE MIGUEL MARCO

Los futuros candidatos del PSOE a la Presidencia del Gobierno saldrán elegidos del voto de los ciudadanos, sin la obligación de ser militantes, y necesitarán menos avales que ahora.


Así consta en el texto de la ponencia marco del 38 congreso que los socialistas celebrarán a primeros de febrero en Sevilla.


Un texto aún sujeto a debate que aboga por seguir el modelo que los socialistas franceses pusieron en marcha para designar a su candidato a la Presidencia de la República, si bien no precisa qué condiciones habrán de cumplir los ciudadanos no militantes que quieran participar. Eso, según la ponencia, lo decidirá la Ejecutiva Federal en su momento.

Virtualización de los militantes

Los socialistas, por tanto, se proponen reformar el sistema de elección de los candidatos, pero también cambiar completamente el funcionamiento del partido, de forma que se plantea la creación de la figura del "afiliado directo" en el marco de lo que en el texto se denomina "agrupación virtual".


De hecho, el PSOE aboga por modernizar sus agrupaciones actuales mediante las redes sociales y a través de una mayor apuesta por el debate y la formación.


En esa línea de modernización, de más formación y más seminarios y debates, algo de lo que tendrá que informar cada dirección local, el Partido Socialista incide en la necesidad de contar con más afiliados, para que lo que abre nuevas campañas de captación.


"Es necesario seguir incrementando el número de personas dentro de nuestra organización, cuantas más seamos mejor escucharemos las demandas de la sociedad", indica el PSOE en la ponencia marco. El afán reformador de los socialistas, cuyo texto de ponencia han coordinador Marcelino Iglesias y Jesús Caldera, alcanza a la dirección federal, en cuya elección y funcionamiento habrá "una mayor democracia interna".


Por un lado, el PSOE sugiere desbloquear las listas y rebajar el porcentaje de voto para obtener representación, en concreto para la elección de los miembros de los comités provinciales, insulares, regionales y el federal.


En este caso, serán elegidos aquellos integrantes de las listas que, habiendo conseguido al menos el 15% de los votos, atraigan más respaldo.


La igualdad de condiciones es un requisito indispensable para los socialistas, según escriben en la ponencia marco, ya que pretenden que quienes aspiren a ser elegidos dispongan de las mismas oportunidades. El PSOE, en este apartado, aboga por modificaciones estatutarias que incluyan "la figura del precandidato".


El miembro del Partido Socialista que se plantee aspirar a la Presidencia del Gobierno, o a las alcaldías importantes o Presidencias autonómicas, también deberán someterse a nuevas reglas. "Ha llegado el momento de dar un paso más" en este aspecto, sentencia el PSOE en la ponencia.


Se trata de buscar "un nuevo tipo de liderazgo" en "diálogo permanente con la sociedad", se dice en el texto, que después subraya: "Es necesario seguir abriendo nuestra organización más allá de nuestras sedes, buscando la complicidad de millones de progresistas que quieran participar, sin la necesidad de ser militantes del PSOE".


Estos ciudadanos no militantes o simpatizantes -figura que los socialistas también quieren revisar- deberán cumplir unas normas, pero éstas las decidirá la Ejecutiva Federal cuando corresponda.


Para el PSOE, además, sería "conveniente" reducir el porcentaje de avales necesarios para optar a la candidatura, de modo que si ahora se exige el 10 por ciento para el Gobierno, el 15 para la comunidad autónoma y el 20 para la alcaldía, en el futuro se podría rebajar a 5, 10 y 15, respectivamente.