"Si en algún lugar tendría repercusiones netamente perniciosas una hipotética secesión, que nunca va a ocurrir, sería en Aragón. Por eso creo que debemos estar especialmente alerta oponiéndonos". Así ha valorado el presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, el proceso independentista que ha puesto en marcha la Generalitat con la aprobación este miércoles de la ley del referéndum.

Lambán, en unas declaraciones realizadas en Huesca durante el acto oficial de inicio del curso escolar, ha puesto en valor las "históricas" relaciones que mantiene Aragón con Cataluña. "Somos los vecinos históricos, geográficos y culturales. Hay una red de relaciones familiares estrecha porque todos tenemos parientes allí, veraneamos allí, y nuestras economías están absolutamente interconectadas hasta el punto de que Cataluña es el principal cliente y proveedor de la economía aragonesa", ha señalado.

El presidente aragonés ha destacado que, a su juicio, España se enfrenta "al problema político e institucional más grave dese el golpe de Estado de 1981 como consecuencia de la insensatez de una parte de los dirigentes de Cataluña, que están encaminados a una situación que atenta contra el Estado de Derecho y contra cinco siglos de convivencia y de pertenencia a la misma comunidad política, vulnerando los derechos de cientos de miles de catalanes que no están de acuerdo en absoluto con lo que está ocurriendo".

Lambán ha dejado claro su apoyo al Gobierno central en las medidas que está adoptando y también ha insistido en que no se puede trasladar la imagen de que todos los catalanes son independentistas. "Tenemos que hacer saber al resto de España que la mayor parte de la sociedad es sensata y poner sobre la mesa lo mucho que nos une", ha dicho.