Detienen a 22 miembros de una red que robaba camiones y operaba en Zaragoza

La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada a la sustracción de camiones cargados de distintos tipos de mercancía.

Algunos de los objetos intervenidos.
Algunos de los objetos intervenidos.
Guardia Civil

La Guardia Civil ha detenido a 22 personas por los delitos de pertenencia a organización criminal, robo con fuerza en las cosas, sustracción de vehículos y receptación.

En el marco de la operación 'Furtum carrus', los agentes han desarticulado en las provincias de Zaragoza, Cuenca, Castellón, Madrid y Ciudad Real una red criminal dedicada a la sustracción de camiones cargados de distintos tipos de mercancía, que posteriormente ponían a la venta a través de establecimientos comerciales.

La mayor parte de los artículos robados eran electrodomésticos, aunque también otro tipo de objetos como vinos, calzados, mobiliario, piezas de automoción, cosméticos o perfumes de gama alta. El valor de lo recuperado hasta el momento asciende a unos 250.000 euros.

La operación se inició a raíz de la sustracción de cuatro cabezas tractoras y sus respectivos semirremolques en la provincia de Cuenca. Tras las primeras investigaciones, los agentes descubrieron que los autores de los hechos formaban parte de una organización que estaba perfectamente estructurada y jerarquizada.

Modus operandi

Parte de los miembros de la organización localizaban camiones de gran tonelaje que habitualmente, coincidiendo con los fines de semana, se encontraban cargados en áreas de servicio o en campas de empresas logísticas.

Tras fijar el objetivo y mientras uno o varios delincuentes hacían labores de vigilancia, otros forzaban las cabinas de las cabezas tractoras y hacían un puente en el sistema de arranque del vehículo. Al mismo tiempo, otro de los integrantes de la organización desactivaba el sistema GPS del camión, actuando sobre el propio sistema o a través de inhibidores de frecuencia.

Después de apoderarse de los vehículos, los trasladaban a naves cuyos propietarios, que también formaban parte de la organización, se encargaban de distribuir el género, bien en establecimientos propios o a través de otros comercios. Tras la descarga, los vehículos eran abandonados en polígonos industriales de las provincias de Madrid y Toledo.

En otras ocasiones, camioneros que formaban parte de la organización hurtaban una pequeña parte de los cargamentos que transportaban, justificando posteriormente las faltas como incidencias, de las que se hacía cargo el seguro.

Explotación de la operación en tres fases

En la primera fase se realizaron un total de 9 inspecciones en tiendas de electrodomésticos (6 en Jaén y 3 en Madrid) en las que la Guardia Civil recuperó varias lavadoras, impresoras y escáneres robados y detuvo a 7 personas.

Dentro de la segunda fase de la explotación la Guardia Civil registró los domicilios de los cabecillas de la organización, inspecciones  en campas de estacionamientos de camiones, en una nave de la localidad toledana de Borox y en un establecimiento hostelero de la provincia de Guadalajara.

Esta segunda etapa se cerró con la detención de otras 5 personas y la investigación de otras 3. Además, se recuperaron diversos artículos, entre los que destacan las 5.700 botellas de vino de reserva que habían sido sustraídas en la provincia de Castellón.

La tercera y última fase, hasta el momento, culminó  con la detención de otros 10 componentes de la organización y la investigación de otros 2.

La investigación continúa abierta, por lo que no se descarta el esclarecimiento de nuevos hechos delictivos o que puedan producirse nuevas detenciones.

Las diligencias, junto con los detenidos y los efectos intervenidos, han sido puestos  a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de San Clemente, quien asume la instrucción completa de la causa.

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