La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha anunciado este lunes su intención de formar un nuevo partido político de izquierdas para aspirar a gobernar la Generalitat, tras el éxito de las candidaturas de confluencia en las municipales y en las generales del 20D, en las que fueron la fuerza más votada en Cataluña.

Colau y otros dirigentes de la izquierda alternativa catalana han defendido en rueda de prensa un proyecto que venía configurándose en las últimas semanas.

Este "nuevo espacio político" busca representar el "cambio" en el espacio catalán, más allá de la "sopa de siglas", del "partidismo" y de las coaliciones, y convertirse en una "apuesta de futuro", en un contexto en el que se prevé una legislatura corta en Cataluña, de aproximadamente 18 meses, pues va ligada al proceso independentista.

Tras un debate "transversal", "abierto" y con los ciudadanos como protagonistas, el nuevo partido político se materializará en una asamblea constituyente, si bien todavía no se ha fijado un calendario concreto, con la participación de partidos y movimientos sociales.

La alcaldesa y líder de Barcelona En Comú ha tendido la mano a "todo el mundo" para sumarse a este proyecto, pero en especial ha hecho un guiño a la CUP y al sector más catalanista del PSC que "se siente abandonado", ha dicho, tras el desmarque de este partido de una consulta legal y acordada sobre el encaje de Cataluña.

La idea de construir una alternativa de izquierdas de manera permanente es también una vieja reivindicación de algunos de los socios de coalición de Colau en las municipales y generales, como ICV e, incluso, de Podem Catalunya, que ven con buenos ojos la iniciativa que quiere promover la alcaldesa de Barcelona.

No obstante, tanto ICV como Podem abordarán esta cuestión en sus respectivos cónclaves y asambleas en las que ambas formaciones tienen que renovar su dirección, mientras que EUiA también tiene previsto celebrar este año una asamblea.

Por lo pronto, y poco después de que Colau haya hecho su anuncio, la portavoz de ICV, Marta Ribas, ha defendido la necesidad de crear un espacio de izquierdas "estable" que vaya más allá de alianzas y coaliciones puntuales con una finalidad electoral.

También, el portavoz de Podem Catalunya, Marc Bartomeu, ha señalado en declaraciones a Efe que la apuesta de su formación por la confluencia "ha sido constante", aunque la propuesta de Colau supone un "paso más" hacia una organización "más uniforme".

En este sentido, Bartomeu ha explicado que Podem Catalunya decidirá en su asamblea ciudadana si se suma a la apuesta de la líder de BComú, por lo que previamente tienen previsto celebrar debate los meses de febrero y marzo, antes de la votación antes o inmediatamente después de Semana Santa.

Bartomeu ha asegurado que si su formación se suma a este nuevo partido el tema de las "marcas" estará en la "parte baja del orden de prioridades", como tampoco serán una "línea roja" los nombres o los cargos directivos.

Por su parte, en declaraciones a Efe, el dirigente de EUiA Joan Josep Nuet, ha aplaudido la propuesta de configurar un "nuevo espacio" de izquierdas, y ha asegurado que "tendremos la suficiente inteligencia política para encontrar el punto de encuentro, tanto en el discurso como en las personas y la forma de organización".

"Esto no es un partido más -ha dicho- es un movimiento político que representará mucho que lo que hasta ahora han representado las fuerzas políticas catalanas".

Colau no ha concretado el papel que podría desempeñar en este nuevo partido de izquierdas ya que, ha explicado, "en estos momentos no se está hablando ni de personas ni de cargos", aunque ha manifestado su compromiso con este proyecto.