PP y PSOE piden que Zapata deje el acta y Podemos asegura que se trata de un "tamayazo"

La decisión de Zapata de no renunciar a ser concejal no ha dejado indiferente a nadie.

Zapata en una foto de archivo.
Zapata puso hace cuatro años "chistes" sobre el Holocausto o víctimas del terrorismo.
Reuters

El PSOE y el PP han reclamado que el exconcejal de Cultura del Ayuntamiento de Madrid Guillermo Zapata deje también el acta de edil por sus tuits sobre judíos y víctimas del terrorismo, mientras que Podemos ha alertado de la posibilidad de que haya quienes estén trabajando para un "tamayazo en diferido".


Zapata renunció como responsable municipal de Cultura y Deportes -aunque no a su puesto de concejal de Ahora Madrid- para no condicionar al Gobierno encabezado por Manuela Carmena tras pedir perdón por sus bromas sobre judíos y víctimas del terrorismo.


La decisión del edil no ha satisfecho al socio de gobierno del partido fundado por Ganemos, Podemos y Equo, el socialista Antonio Miguel Carmona, que ha indicado hoy que espera la dimisión de Zapata de todas sus responsabilidades.


Carmona ha sostenido además que no debe haber imputados en cargos públicos en referencia a la Portavoz del Gobierno municipal, coordinadora de la Junta de Gobierno y responsable de Relaciones con el Pleno, Rita Maestre, para quien la Fiscalía de Madrid solicita un año de prisión por un delito contra los sentimientos religiosos, como consecuencia de su participación en una protesta en la capilla de la Universidad Complutense en 2011.


Los comentarios de Zapata en la red social Twitter han seguido recibiendo críticas , como la del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que ha calificado de "repugnantes" los mensajes que publicó en Twitter en 2011 y le ha exigido que renuncie al acta de edil.


Fernández Díaz ha dicho que, sin perjuicio de la calificación jurídica de esas conductas, que corresponde decidir a la Fiscalía y en última instancia a la autoridad judicial, "es evidente que éticamente son repugnantes".


La candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, también ha manifestado que el exresponsable de Cultura del Ayuntamiento madrileño debería dejar también la presidencia del distrito de Fuencarral-El Pardo, que aún mantiene.


A su juicio, lo que han hecho este concejal o sus compañeros de Gobierno, como Pablo Soto -que habló de fusilar a Alberto Ruiz-Gallardón- y Jorge García Castaño -que escribió sobre empalar a Toni Cantó-, es "intolerable" y "tiene que tener consecuencias".


Cifuentes ha llamado además al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, a ser consciente de que "con quién ha pactado" y de quiénes son las personas "que van a gobernar gracias a los votos del Partido Socialista".


En este misma línea, el portavoz del PP, Rafael Hernando, ha acusado al líder del PSOE de apoyar partidos como Podemos de la "izquierda extremista" que, según ha dicho, "fomenta y ampara la violencia" y el "asalto a los bienes de los demás", en referencia al ataque a una casa del líder opositor venezolano Henrique Capriles.


Por su parte, el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, ha acusado a los dirigentes de Podemos de ser "muy exigentes" con los demás, pero "muy laxos" consigo mismos y ha criticado que la "nueva política" consista en "dimisiones a medias", como la de Zapata.


Hernando ha sostenido que si Zapata hubiera sido un concejal del PSOE habría renunciado a su acta de concejal y habría abandonado el Ayuntamiento.


Desde Podemos, el secretario de Relaciones con la Sociedad Civil, Rafael Mayoral, ha mostrado su "honda preocupación" ante la posibilidad de que la polémica generada por los tuits de los concejales de Ahora Madrid responda al interés de algunos de trabajar a favor de un "tamayazo en diferido".


Tras asegurar que Podemos no comparte el tono de la polémica sobre los mensajes de Zapata, Mayoral se ha mostrado partidario de escuchar el debate que ya está en la opinión pública y abrir una reflexión sobre esa posibilidad tras la "situación artificial" que se está generando.


Sobre la imputación de Rita Maestre, Mayoral ha se ha limitado a señalar que hay un procedimiento judicial pendiente por una movilización que simplemente reclamaba la laicidad en la educación pública.