El acusado de robar el Códice tiene un trastorno de "acumulación compulsiva"

Una prueba psicológica sostiene que Fernández Castiñeiras "es incapaz de controlarse".

Macroproceso por el Códice Calixtino
El acusado de robar el Códice tiene un trastorno de "acumulación compulsiva"

Una prueba pericial psicológica encargada por la defensa del principal acusado del robo del Códice Calixtino determina que José Manuel Fernández Castiñeiras padece un trastorno de "acumulación compulsiva" y no puede "controlar el impulso de coger cosas".


Así lo ha asegurado este martes, en la novena sesión del juicio, un psicólogo que trató al exelectricista en unas 15 ocasiones tras su detención y que ha incorporado un informe pericial a la causa.


Para el experto, Fernández Castiñeiras tiene un trastorno de "acumulación compulsiva de cosas" de las que, después de cogerlas, es "incapaz de deshacerse", y "necesitaba" medicación para tratarse, aunque a su llegada a su consulta "no estaba a tratamiento".


El psicólogo ha vinculado este tipo de patología al Trastorno Obsesivo Compulsivo por el "nivel alto de ansiedad" del paciente, aunque ha rechazado que se vincule a la cleptomanía o al Síndrome de Diógenes, dado que es "más organizado" en este caso.


"No se puede controlar, no puede controlar los impulsos de coger cosas", ha explicado el perito, para quien la "ansiedad" y la "obsesión" del paciente es "tan elevada" que la "respuesta de inhibición" para rechazar este comportamiento "es tan baja que no es capaz de activarse".Una vida "muy compleja"

Este trastorno, ha aclarado el experto, está considerado como una "de las 20 enfermedades más limitantes", dado que "mucha parte de la vida del paciente" se ocupa en estas "obsesiones" y genera una vida "muy compleja".


"Manuel no es consciente de que tiene la enfermedad", ha explicado el psicólogo, quien ha contado que fue su mujer la que le "obligó" a ir a su consulta tras la detención y al "percatarse de que tenía un problema".


En la misma línea de lo declarado por su familia, el experto ha reconocido que Fernández Castiñeiras tenía "unas dependencias que eran como su Santa Sanctorum" en su domicilio, con acceso "vetado" para su mujer e hijo y "donde acumulaba". Entre sus preferencias, lo ha calificado como "documentalista", ya que "lo que más le atraen son los documentos".


Aunque para el psicólogo este trastorno estaba presente desde la "adolescencia" de Castiñeiras, los comportamientos han continuado posteriormente. "Durante su estancia en prisión, acumulaba los tickets de la cafetería", ha narrado. A mayores, precisa que "coge los objetos pero no por el valor real que tiene, sino por mitigar esta ansiedad".


Entre otras pruebas, el psicólogo realizó a Fernández Castiñeiras un test de personalidad, con el que pudo determinar que el carácter del exelectricista está caracterizado por la "falta de empatía" y la dureza". De hecho, lo ha calificado como una persona "muy rígida" y "recta", a la que "no le gusta que le lleven la contraria".