Ni la reforma sanitaria, ni el ébola: el caso Gürtel sentencia a Ana Mato

Mato siempre ha defendido su inocencia en la que también ha creído el presidente del Gobierno.

Ana Mato en una foto de archivo
Ni la reforma sanitaria, ni el ébola: el caso Gürtel sentencia a Ana Mato
Afp

Ni la reforma sanitaria, ni la gestión de la crisis provocada por el ébola han sido las causantes de la dimisión de Ana Mato al frente del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, sino la trama corrupta destapada en el caso Gürtel, cuya alargada sombra le ha perseguido durante casi dos años.


Mato se ha tenido que enfrentar en sus tres años como titular de este departamento a numerosas críticas, que arreciaron con la aprobación de la reforma sanitaria, que introducía el copago farmacéutico según la renta, incluidos los pensionistas, y retiraba la tarjeta sanitaria a los inmigrantes irregulares.


La reforma, aprobada el 20 de abril de 2012, a través del real decreto ley de medidas urgentes para la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS), tenía como objetivo, dijo la ministra entonces, ahorrar 7.000 millones de euros, pero el sector sanitario, las organizaciones sociales y los partidos de la oposición mostraron sus reticencias.


En general, tanto los grupos políticos como las organizaciones del sector sanitario han censurado los "recortes" presupuestarios y la "privatización" de la Sanidad pública desde que asumió esta cartera, lo que ha conllevado numerosas movilizaciones.


La ministra dijo entonces que un sistema sanitario "en quiebra" y con una deuda de 15.000 millones de euros "heredada" del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero eran motivos más que suficientes para justificar las reformas, explicaciones que no terminaron de convencer y comenzaron a sucederse las peticiones de dimisión.


El decreto también sentaba las bases para establecer una cartera común de servicios para eliminar las diferencias en la Sanidad entre las distintas comunidades autónomas, una meta que siempre ha perseguido la hasta ahora ministra.


La reforma de la ley de la dependencia, aprobada el 13 de julio de ese mismo año, con el fin de fomentar los cuidados profesiones de los dependientes sobre los familiares, a los que se bajó un 15 por ciento la paga, cosechó también críticas de algunas organizaciones y de las comunidades gobernadas por partidos de la oposición.


Meses después, en concreto el 1 de febrero de 2013, un informe policial notificado por el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, aportó datos de gastos de viajes y regalos pagados por la red Gürtel al exalcalde de Pozuelo de Alarcón y exmarido de Mato, Jesús Sepúlveda y en el que ella aparecía como receptora de algunos de esos regalos.


Mato siempre ha defendido su inocencia, en la que también ha creído el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien entonces la dijo en una reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP: "Ánimo, fuerte y tranquila".


Entre sus logros figura el haber alcanzado en julio del pasado año un Pacto por la Sanidad con médicos y enfermeros para garantizar la sostenibilidad y la calidad del sistema sanitario, y el haber sacado adelante planes para atajar la exclusión social y para proteger a la infancia.


Con la reforma sanitaria implantada, Mato se encontró con otra piedra en el camino: el virus el Ébola. La repatriación de dos religiosos infectados que fallecieron en España y el posterior contagio de Teresa Romero, una auxiliar de enfermería que les había atendido, volvieron a reavivar las peticiones de destitución de la ministra por la gestión de esta crisis sanitaria.


Finalmente, el Gobierno creó un Comité Especial de Seguimiento de la enfermedad, presidido por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que la oposición interpretó como una pérdida de autoridad de Mato al tiempo que censuró que se demorara su comparecencia en el Parlamento sobre este asunto.


La curación de Teresa Romero desactivó en parte la polémica hasta que este miércoles de nuevo el juez Ruz ha insistido en la relación de la titular de Sanidad con el caso Gürtel.


Ruz ha incluido a Mato como responsable civil por los regalos que presuntamente recibió de su exmarido. De acuerdo con el artículo 122 del Código Penal, el magistrado la considera "partícipe a título lucrativo" de los regalos de la red Gürtel, lo que supone que, si bien no se la acusa de ningún delito, se la podría enjuiciar como responsable civil para que restituya el dinero del que presuntamente se ha beneficiado.


A última hora de la tarde, Mato ha anunciado su dimisión en un comunicado con el membrete del Ministerio y ha aclarado que "en ningún caso" el juez le imputa "ningún delito" ni tampoco le atribuye "responsabilidad penal alguna".


"No quiero, bajo ningún concepto, que mi permanencia en esta responsabilidad pueda ser utilizada para perjudicar al Gobierno de España, a su presidente ni tampoco al Partido Popular", ha aseverado.

En el texto, se despide afirmando que ha sido un "honor" servir a España como ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad durante estos casi tres años, bajo la presidencia de Mariano Rajoy.